El Pontevedra se queda a once metros del triunfo. Los granates fueron los dueños del balón frente a un muy defensivo Navalcarnero, que con dos líenas defensivas de cinco y cuatro jugadores, supo cerrar la puerta de su área ante las numerosas pero estériles acometidas de los locales.
Los de Rodríguez trataron por todos los medios de encontrar el camino hacia la meta rival, pero no tuvieron opciones de generar ocasiones claras de peligro. Los centros laterales no surtieron efecto esta vez y el juego interior de Yelko, Brais y Oier tampoco brilló como en anteriores ocasiones. Y, además, Charles, pichichi del grupo y especialista en el lanzamiento de penaltis, tampoco estuvo acertado a la hora de ajusticiar a su rival cuando el partido caminaba ya hacia el que acabó siendo un definitvo empate sin goles.
Saltó el Pontevedra al campo decidido a dominar el juego y a encerrar al rival en su propio campo y a los tres minutos ya protagonizó la primera llegada con peligro a la meta contraria. Fue a través de un centro desde la izquierda de Brais Abelenda que no encontró rematador. Y acto seguido, a la salida de un córner Churre tuvo la opción de hacer su primer tanto con la camiseta granate con un doble remate que acabó saliendo por encima de la portería de Aitor González.
Los granates acosaban al Navalcarnero, que era incapaz de mantener el balón e hilbanar más de dos pases. Charles, con un potente volea pudo inaugurar el marcador tras centro de Oier, que formó pareja atacante con el pichichi del grupo.
Sin embargo, el empuje granate, que siguieron siendo dueños absolutos del balón, se fue diluyendo y los visitantes pudieron dar un susto a la parroquia local. Fue después de un córner cuando Dani Rodríguez desvió un disparo desde fuera del área, que golpeó en el palo para cazar luego el rebote y enviar el balón al fondo de la red. Sin embargo, el capitán del Navalcarnero estaba en fuera de juego y el asistente levantó con acierto el banderín para alivio de los granates.
Con menos frecuencia que en el arranque del partido, los de Ángel Rodríguez siguieron acumulando llegadas al área. Rubio lo intentó desde fuera del área, pero su disparo salió alto, Yelko no acertó a tirar desde dentro del área tras una llegada de Charles y el ariete brasileño desperdició la ocasión más clara al filo del descanso. Un despeje al aire de Soto se convirtió en una maravillosa asistencia para el delantero granate, que ganó la carrera a su marcador y cuando se iba a plantar solo delante del portero erró en el control con el pecho. Logró mantener el balón y lo cedió a Oier, que entraba en carrera, pero su lanzamiento lo detuvo González sin grandes dificultades.
Tras el paso por vestuarios, fue el Navalcarnero el que pudo desequilibrar el partido a través de una galopada de Beneit, el mejor de los visitantes, que recibió el balón en el centro del campo y corrió hasta la frontal para armar un peligroso disparo raso que obligó e esforzarse a fondo a Cacharrón, que sacó una manopla para despejar un balón ajustado a la cepa del poste.
Fue el único aviso del cuadro madrileño en todo el partido. Luego volvieron a encerrarse en su propio campo sin dejar huecos por los que pudiese el Pontevedra filtrar sus jugadas de ataque. Álex González, halló uno de esos huecos y ganó la línea de fondo, pero su pase de la muerte no encontró rematador.
Luego Rubio puso un jugoso balón al área pequeña para el remate de Yelko. que trató de tirar al primer toque pero no conectó bien con el balón. Tampoco acertó Oier con la portería después de recibir una buena asistencia de Pino y regatear al portero, sin embargo la jugada estaba anulada por fuera de juego. Brais lo intentó desde fuera del área, pero su lanzamiento fue bloqueado por la defensa rival.
Se desesperaba el Pontevedra y la afición porque no lograban traducir el dominio en ocasiones claras de gol y cuando el partido navegaba ya hacia un empate sin goles tuvieron los granates la mejor oportunidad para hacerse con el triunfo. Brais Abelenda se internó en el área, pisó el balón y, rodeado de tres defensores, se inventó una ruleta al más puro estilo Zidane. El exgranate Aitor Núñez metió la pierna para robar el balón, pero golpeó la pierna de Abelenda. Penalti y júbilo en la grada.
Charles, especialista desde los once metros y pichichi del grupo, cogió el balón para adelantar a los suyos. Sin embargo, su tiro raso defectuoso a la izquierda lo interceptó González para amarrar el empate y dejar a los granates con la miel en los labios.
PONTEVEDRA CF (0): Cacharrón, Seoane, Churre, David Soto, Álex González; Miguel Román, Yelko Pino, Brais Abelenda (Jaichenco, min 88), Alberto Rubio (Martín Diz, min 75), Oier Calvillo (Romay, min 66), Charles
NAVALCARNERO (0): Aitor González; Aitor Núñez, David Uña, Luis Fernández, Miguel Muñoz, Dani Hernández; Dani Rodríguez, David Rodríguez; Álex Gil (Francisco, min 66), Marcos Ambrosio (Ontiveros, min 77), Beneit (Sergio Navarro, min 89)
Árbitro: Eduardo Rodríguez García, auxiliado en las bandas por Veiga Romero y Barriga Morente (Asturias), amonestó a David Uña, do Navalcarnero
Incidencias: Partido correspondiente a la undécima jornada de liga en el Grupo I de la Segunda RFEF disputado en el Estadio Municipal de Pasarón ante alrededor de 1.500 espectadores.