"A loita continúa", el mensaje unánime de Pontevedra contra la violencia de género tras el asesinato de Vanessa en Oia

Pontevedra
05 de junio 2023

El luto por el asesinato machista de Ana Vanessa Serén el pasado sábado en Santa María de Oia llegó este lunes hasta la ciudad de Pontevedra. La Deputación Provincial se sumó al luto oficial y las fuerzas políticas se sumaron la una concentración y un minuto de silencio organizado en la Subdelegación del Gobierno 

Concentración por el asesinato de Ana Vanessa Serén Pena ante la Subdelegación del Gobierno
Concentración por el asesinato de Ana Vanessa Serén Pena ante la Subdelegación del Gobierno

El luto por el asesinato machista de Ana Vanessa Serén el pasado sábado en Santa María de Oia llegó este lunes hasta la ciudad de Pontevedra. La Deputación Provincial se sumó al luto oficial, las banderas del Pazo Provincial y del edificio administrativo lucen la media asta durante tres días y las fuerzas políticas se sumaron la una concentración y un minuto de silencio organizado en la Subdelegación del Gobierno en Pontevedra. 

La subdelegada del Gobierno, Maica Larriba, presidió la concentración, a la que también asistió el alcalde de Pontevedra, Miguel Anxo Fernández Lores; el coronel jefe de la Comandancia de la Guardia Civil de Pontevedra, Simón Venzal; y el comisario provincial de la Policía Nacional, Juan José Diaz. 

Tanto Lores como Larriba insistieron en que "la lucha continúa". Es, según el alcalde, "una lucha compleja" en la que se lleva años haciendo un esfuerzo de formación, información y acompañamiento a las víctimas, "pero los objetivos no se siguen fácilmente".

Todos los presentes mostraron su repulsa por el crimen y quisieron transmitir a todas las mujeres que están sufriendo violencia "que no están solas, que la sociedad mayoritariamente está con ellas" y en contra de los hombres que las matan "simplemente por ser mujeres y porque hay un machismo reinante de muchos años de evolución que costa trabajo revertirlo".

"Nos sentimos impotentes como sociedad", señaló Lores. Y Larriba añadió que "seguimos adelante" en la lucha contra esta "lacra que asesina mujeres por el hecho de ser mujeres".

Larriba confirmó que la víctima figuraba en el sistema VioGén de atención a las víctimas de violencia de género con un riesgo medio y las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado realizaron un total de 56 actuaciones para esta protección, acciones tales como comunicación, entrevistas y llamadas.

El asesino no había quebrantado en ningún momento las órdenes de alejamiento e incomunicación. Además, la subdelegada del Gobierno confirmó que el arma de fuego empleada por el asesino, una escopeta, no consta en los registros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad ni españoles ni portugueses, analizados por causa de la cercanía de la localidad al país vecino.

El Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG) confirmó que la víctima había denunciado y que el caso llegó Juzgado de Violencia sobre la Mujer de Vigo el 5 de abril, donde se acordó la puesta en libertad del detenido y se dictó la orden de protección para la víctima, que incluía protección comunicación y acercamiento. El caso no llegó a juicio porque la víctima relató dos episodios y el juzgado no disponía de los informes necesarios

El día del crimen, el hombre esperó durante horas en el exterior del camping O Muíño, donde trabajaba como responsable del servicio de limpieza. Esperó en una furgoneta y, cuando ella salió, la mató a tiros con su escopeta. Luego, huyó y la Guardia Civil lo buscó por tierra y aire hasta que llegó a acorralarlo. Durante dos horas, negociaron con él para que se entregara, pero acabó suicidándose con la misma escopeta.

A nivel provincial, la presidenta en funciones de la Deputación, Carmela Silva, condenó el crimen y la Guardia Civil se sumó al luto y, como muestra de "dolor por la trágica muerte" de Ana Vanessa Serén Pena, suspendió los actos de celebración del 179 aniversario de la fundación de la Guardia Civil previstos para este martes 6 de junio en Tui.

En Pontevedra, la portavoz del Gobierno local, Anabel Gulías, señaló que, si algo demuestra este crimen es que "os protocolos non funcionan para protexer as mulleres". En este caso, no solo la mujer tenía orden protección, sino que "quen debía protexer as vítimas converteuse en asasino".

"Os protocolos non  funcionan e temos que facer un esforzo para cambialos", señaló Gulías.