Los propietarios forestales de Pontevedra vendieron el año pasado madera por un importe total de 34 millones de euros, de los que 16,5 millones corresponden al pino, 16,8 al eucalipto y 0,8 a las frondosas caducifolias, que más allá de su uso para leñas domésticas, continúan tenieddo un aprovechamiento residual para la industria.
Los datos son estimaciones de la Asociación Forestal de Galicia elaboradas a partir de los datos de talas de la Consellería de Medio Rural y vienen a demostrar que el monte gallego es "un buen inversión para las familias gallegas", además de que fue en 2021 más rentable que el año anterior.
Así, la facturación por el eucalipto en Pontevedra en el 2021 fue prácticamente la misma que en el año anterior, pero en pino a facturación creció por encima del 70%, fruto del aumento de los precios de la madera y también de un ligero aumento de las talas.
Según esta asociación sectorial, el aspecto más destacado del último año fue el aumento progresivo de los precios en la madera de pino, que se intensificó en el segundo semestre del 2021. Este aumento se debió a la situación del mercado internacional, en el que se produjo una mejora de la demanda.
Los precios del pino para sierra se sitúan ya alrededor de un 40 – 50 % por encima de los registrados en el 2020. En eucalipto, el mercado experimentó menores cambios en el 2021, con una ligera subida al largo del año por la mejora de los precios de la pasta de papel.
Pontevedra manténse como la tercera provincia en importancia del sector forestal, por delante de Ourense y por detras de A Coruña y Lugo. Su facturación de 2021 fue alrededor de un 11% de lo facturado por el sector en Galicia.
Por distritos forestales, Caldas-O Salnés y Deza-Tabeirós son los más destacados. O Deza es líder en facturación de pinos, en tanto Caldas lidera el ranking de facturación en eucaliptos.