Hasta 1,1 millones de euros tiene previsto invertir la Xunta de Galicia en un proyecto destinado a incorporar todas las naves del antiguo complejo conservero de los hermanos Massó en el funcionamiento del museo que lleva su nombre.
Será una actuación que, según ha destacado el conselleiro de Cultura, Román Rodríguez, supondrá un "punto de inflexión" en la historia de este museo marinero, al dotarlo de una mayor funcionalidad y de los espacios suficientes para "poner en valor" sus fondos.
Los trabajos se centrarán en ampliar el acondicionamiento de la conocida como Sala Lugrís, para integrarla en la exposición permanente del museo.
Esta iniciativa permitirá mostrar al público fondos que actualmente permanecen guardados como la serie de seis pinturas de gran formato realizadas en los años 40 para el comedor de las trabajadoras de la conservera y que ocupan cerca de 300 metros lineales.
Además, la rehabilitación prevista incluye también la mejora de los pavimentos y estructuras verticales, la consolidación de muros estructurales y forjados de pisos y se actuará también sobre acabados, instalaciones, sistemas de aislamiento y acondicionamiento ambiental.
Otra de las áreas sobre las que se va a actuar es el tramo sur de la nave de la antigua conservera, integrado en la exposición permanente desde 2011 para mostrar las embarcaciones y la actividad portuaria.
En ella, se hará una rehabilitación integral, respetando sus valores culturales y garantizando la sostenibilidad, eficiencia y funcionalidad, según ha explicado el conselleiro, que ha avanzado que la tramitación de esta rehabilitación comenzará en unas semanas.
El proyecto se completa con la rehabilitación de la antigua nave de atadores, que se destinará a almacén para las colecciones del museo, y la recuperación de la antigua nave de la conservera como espacio único, con la demolición de los tabiques interiores.
A mayores, la Xunta prevé la mejora de la accesibilidad a las diferentes zonas visitables.