Técnicos de diferentes departamentos de la Xunta empezarán esta semana a trabajar para evaluar la situación de los incendios forestales y planificar las medidas necesarias de actuación sobre los terrenos, con el fin de evitar el arrastre de cenizas y favorecer la recuperación de la vegetación, así como el control de la calidad del agua.
La conselleira del Medio Rural, Ángeles Vázquez, explicó que se le dará prioridad a los fuegos que afectaron más de 300 hectáreas, sin descuidar otros de menor extensión pero que afectaron zonas sensibles.
Este lunes la titular de Medio Rural presidió la mesa de coordinación de acciones técnicas post-incendios, como primer paso en la toma de decisiones técnicas tras la ola de fuegos.
La conselleira destacó, tras este encuentro de trabajo, la importancia de coordinar la información sobre lo sucedido y la actuación posterior, para optimizar los esfuerzos de todos los agentes implicados. Se trata, añadió, de "reforzar la coordinación y evitar la improvisación".
Ángeles Vázquez señaló que, entre otras medidas, se estudiará el uso de técnicas de protección del suelo como el mulching o el helimulching (utilizar una cobertura de paja en las zonas quemadas, para evitar arrastres), así como la instalación de barreras e incluso de mallas de geo-textil en áreas al lado del mar, para proteger los bancos marisqueros.
Además, la titular de Medio Rural dijo que en los trabajos técnicos participarán expertos del Centro de Formación y Experimentación Agroforestal de Lourizán, que coordinarán los estudios preceptivos para determinar las zonas y medidas de actuación.