España sigue en "confinamiento general". Así lo ha apuntado este domingo el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que ha querido dejar claro que el estado de alarma "se mantiene" y que, ante el coronavirus, "no hay que bajar la guardia".
Por ahora solo ha terminado, según Sánchez, la "medida extrema" adoptada esta Semana Santa para la "hibernación" de todas las actividades no esenciales. Lo que los técnicos llaman "desescalada", es decir, el regreso a la normalidad, aún tardará en llegar.
Tras la reunión que, a través de videoconferencia ha mantenido con los presidentes autonómicos, el presidente del Gobierno ha explicado que, si los datos así lo avalan, la salida del estado de alarma será "de forma progresiva y cautelosa".
"No estamos siquiera entrando en esta fase", ha añadido Pedro Sánchez. Esta medida, en todo caso, se producirá "como pronto" dentro de dos semanas. Se mantendrán todas las restricciones, por lo tanto, hasta el próximo 26 de abril.
Además, el Gobierno no descarta que llegado ese día puedan mantenerse o reforzarse el confinamiento porque "lo importante es la salud", ha reiterado el dirigente socialista.
Las cifras de la pandemia en España, ha dicho Sánchez, han comenzado a reducirse, aunque sigan siendo "extraordinariamente altas", lo que permitiendo "aliviar" el sistema sanitario. Por ello, desde el Ejecutivo central han pedido un nuevo esfuerzo a la población para mantener el confinamiento y seguir "ganando terreno" al virus.