Peor, imposible

17 de enero 2025

¿En qué empresa, después de licitar una obra y ejecutarla con un sobrecoste de 470 millones, con 700 camas menos, no hay consecuencias para quienes se han encargado de tal desastre?

¿En qué empresa, después de licitar una obra por más de mil doscientos millones de euros y ejecutarla con un sobrecoste de 470 millones, con 700 camas menos, 12.000 metros cuadrados de superficie menos y 16.000 metros cuadrados de superficie para aparcamiento de menos, no hay consecuencias para quienes se han encargado de tal desastre? En la Xunta de Galicia.

Los datos pertenecen a la ejecución del Hospital Público Álvaro Cunqueiro, en Vigo, y los que se encargaron del desastre los dirigentes del Gobierno autonómico liderados por el gran Alberto Nuñez Feijoo. Sí, ese modelo de gestor que ahora campa a sus anchas por todo el país. 

Y la información no son datos aportados por la oscura y desleal oposición, sino por el mismísimo Consello de Contas, en un informe casi tal largo como los desvíos presupuestarios del gobierno de Feijoo. El mismo gobierno que frenó una comisión de investigación en el parlamento gallego para analizar el porqué en el desvío. 

Si, señores, nuevamente Feijoo. Siento que vuelvan a sentirse defraudados, pero es la realidad. El mismo que se pasa el día hablando de lo público, de su servicio a la patria y de su respeto a la democracia, ocultó a los gallegos porqué tuvimos que pagar más por una infraestructura que, además, no cumplió con lo licitado. 

Sin embargo, lo que me llevó a pensar esta semana en el asunto fue una visita al susodicho hospital. Cientos de personas hacen cola y dan vueltas al entorno hospitalario en busca de una plaza de aparcamiento dónde dejar su vehículo sin tener que dejarse medio sueldo en un parking privado. 

¿Quién proyecta una infraestructura pública de estas características y no prevé plazas de aparcamiento para los usuarios? ¿No saben que se trata de un servicio casi tan necesario como las camas de hospitalización?

¿Se han pagado casi quinientos millones de euros de más, pero no había dinero para construir un aparcamiento público? No me lo creo. Lo que sí creo es que ese servicio lo dejan reservado para empresas privadas, para que exploten con sus tarifas a los que tenemos la desgracia de tener que acudir al hospital.

No soy sospechoso de criminalizar lo público, todo lo contrario, pero, ¿no valdría la pena invertir un poco más y ofrecer aparcamiento para los usuarios y sus familiares, que bastante tienen con verse en la tesitura de usar el hospital? No creo que, al menos en esta ocasión, la excusa fuese la falta de dinero, a la vista del derroche.