Beatriz Suárez-Vence Castro
Mujeres Yazidíes
Vemos sus ojos, sorprendentemente claros, centelleando en una piel oscura, la misma que cubre sus manos, situadas en primer plano; manos que sujetan el resto de la pieza de tela que cubre el resto de su rostro. Sin embargo, donde esperábamos una mirada triste encontramos una mezcla de curiosidad y timidez. Es la mirada de una mujer yizadí, liberada de la esclavitud. Los ojos le bastan para transmitir que no se ha rendido, que si pudiésemos ver su boca oculta por el ropaje, comprobaríamos que sigue siendo capaz de esbozar una sonrisa.
El retrato, asombrosamente expresivo, es la pieza principal del conjunto de fotografías que Roger Calabuig expone a partir del 29 de este mes en el Liceo Casino de Pontevedra.
Roger es uno de los componentes de Jinda España, proyecto derivado de la ONG Wadi, que trata de dar a conocer el infierno porque el que ha atravesado el pueblo Yazidí, víctima del exterminio provocado por el Yihad islámico.
Los yazidíes son una comunidad religiosa que se ha mantenido aislada en pequeñas comunidades de Irak, Siria y Turquía. No es posible convertirse al Yazidismo, al que solo puede pertenecerse por nacimiento. Tampoco un yazidí puede convertirse a ninguna otra religión. Su nombre deriva del persa y siguen tanto la Biblia como el Corán.
Poco se sabe de ellos y ahora están tristemente de actualidad, debido a la noticia de que un grupo de unos cincuenta mil, han sido localizados en las montañas irakíes sin comida ni agua, huyendo del horror.
Calbuig es un creador polifacético con una clara preocupación social. Ganador del primer concurso de relatos Fuentetaja con su obra El Cielo de Madrid, llega a Pontevedra, tras un periplo como cooperante internacional en diversos países, para mostrarnos los rostros de estas mujeres, en los que se refleja la lucha del ser humano por sobrevivir aún en las peores condiciones.