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Cambiar de trabajo no es causa de despido
La constitución reconoce el derecho al trabajo, el deber de trabajar y a la promoción en el trabajo. Reconocimiento del artículo 35, que está en la parte de la constitución que es una declaración de intenciones aceptada por todas las partes . Los poderes públicos deben de tender en sus actuaciones a conseguir esos objetivos y el legislador no puede perderlos de vista cuando articula el ordenamiento jurídico. Por tanto, cambiar de trabajo a otro que subjetivamente se considera mejor (ya sea por salario, por tipo de actividad, por horario…) es un derecho. Ejercer un derecho no es motivo para que te despidan, salvo que ese ejercicio lesione gravemente derechos ajenos.
Hace unos días un profesional muy reputado fue despedido por haber anunciado a su empresa que, una vez terminado el proyecto que tenía entre manos, se iba a trabajar a otra empresa del sector (que no de la competencia directa). La empresa inicial había llegado apenas un mes antes a un acuerdo de ampliación del contrato con este profesional durante un par de años, acuerdo en el que la posibilidad de que tuviese otras ofertas era tan evidente que se pactó el pago de dos millones de euros para el caso de que decidiese no cumplirlo hasta el final.
Es probable que el perspicaz lector se haya dado cuenta de que el trabajador en cuestión (probablemente con un contrato de alta dirección) era el seleccionador nacional de fútbol, Julen Lopetegui que tuvo la pintoresca idea de aceptar la propuesta de empleo que le ha hecho el Real Madrid.
Que un seleccionador nacional de fútbol fiche por un equipo de liga regular poco antes de disputar una competición importante no es la primera vez que pasa. En la pasada Eurocopa la selección italiana jugó dirigida por un seleccionador que se iba al Chelsea, la holandesa un mundial sabiendo que el entrenador se iba al Manchester … y en la Eurocopa que España ganó en el 2008, antes de jugar el partido de la semifinal, Luis Aragonés anunció que se iba a entrenar al Fenerbahçe. Ninguno de ellos fue despedido por pretender cambiar de trabajo. Bien al contrario, terminaron lo que tenía pendiente con su empleador con solvencia. En el partido inicial de este mundial quizá el concurso de Lopetegui hubiera sido útil … en su condición de portero.
El arranque de cólera y “dignidad” de la federación le ha ahorrado al Real Madrid pagar los dos millones de la cláusula, obligará probablemente a la federación a indemnizar a quien voluntariamente se iba y no ha cambiado situación alguna, porque todos los jugadores de la selección sin excepción han pasado a lo largo de su vida laboral por situaciones de cambio, ausencia, enfermedad y mal rollo con entrenadores diversos. Si resulta que se desestabilizan por estas cosas, no deberían estar en la selección.
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