Pedro De Lorenzo y Macías
San Valentín, investigado y desterrado
Fotografía: © Monasterio de Poio.
Muchas leyendas sobre esta festividad. Tuvieron auge durante la Edad Media, en Francia e Inglaterra, celebrándose el 14 de febrero. Antes festivo, ahora en la reserva.
Raíces precristianas:
Evandro, rey de los arcadios según la mitología, celebraba tres días las Fiestas Lupercales al inicio primaveral, en honor a Lupercus, protector de pastores y sus rebaños. También a la Loba que amantó a los gemelos Rómulo y Remo, fundadores de Roma. La fiesta festejaba el inicio de la primavera y la fertilidad. Fundada Roma, raptaron a las sabinas. Sus parientes situaron la reciente ciudad. Sus hijas se plantaron delante, solicitando el perdón, dando muestras de su encanto con los nuevos inquilinos.
Virgilio, en la Eneida, lo presenta como hijo de Mercurio. Condujo a su pueblo desde Grecia hasta el Lacio (Italia); aportó la cultura griega. Es presentado como un rey optimista y de gran valor. Eneas acudió a él en busca de ayuda, dando origen al pueblo romano.
Es el origen de las fiestas lupercales, sobre el 15 de febrero. Su nombre se deriva de lupus "lobo": representa al dios Fauno y a hircus, (macho cabrío, animal impuro)
LA FIESTA LUPERCALIA: "hombres jóvenes se desnudaban y usaban látigos hechos con piel de cabra o de perro para azotar las espaldas de mujeres, en busca de mejorar su fertilidad".
Los adolescentes sobrevivían un tiempo de la caza y pastoreo, conviviendo con los lobos. En febrero se reunían en la colina donde se fundó Roma, monte Palatino. La ceremonia se iniciaba sacrificando una cabra; con el cuchillo sangriento, señalaba la frente de los elegidos, borrándola con un mechón de lana impregnada en leche. Se iniciaba la procesión desnudos, señalando a mujeres que se ofrecían en su camino. Finalizaba en una gran orgía; era el rito de la fertilidad, considerado un acto de purificación, denominado februatio.
Marco Aurelio Valerio Claudio Gótico, en los años 268 d. C prohibió casarse a los jóvenes; consideraba el matrimonio incompatible con la vida militar.
Aparece Valentín. El emperador mandó que lo decapitasen. En su juicio, sumarísimo se hicieron las siguientes menciones. Año 270 d. C:
- Valentín, sacerdote cristiano, casaba en secreto a los jóvenes.
- Valentín se enamoró de la hija de su carcelero.
- La hija del carcelero era ciega y Valentín la curó.
- Que Valentín rehusó a abandonar el cristianismo.
Ya desde el siglo IV se fueron eliminando fiestas paganas. Seguía en su auge las lupercales. En el siglo V d. C, el Papa Gelasio I, instaló a San Valentín como patrón de los enamorados, un día antes de las fiestas paganas, 14 de febrero; habían transcurrido dos siglos. Se crearon infinidad de leyendas.
La tradición popular los intensificó por todos los rincones; afirmando varias iglesias que conservaban reliquias de este santo, "el de los enamorados".
Consultada Catholic Encyclopedia, en el siglo III existieron tres santos con el mismo nombre. El primero ya lo mencionamos. El segundo el obispo de Terni (ciudad italiana ubicada en Umbría). El tercero murió en África, martirizado junto a sus compañeros.
Hay certeza que durante quince siglos se siguió celebrando en la comunidad católica, sobre todo en Francia e Inglaterra.
Todo lo expuesto, llevó a reflexión al papa Pablo VI, en el Concilio Vaticano II, año 1969, eliminar la festividad de san Valentín. Lo enviaron a la reserva, siendo santo, pero sin celebración.
EL DIA DE LOS ENAMORADOS
El 14 de febrero de 1.400, en París, surge la Alta Corte del Amor: concertaba matrimonios, divorcios y asuntos actuales. El Duque Carlos de Orleans escribió su primera carta de "San Valentín" a su amada, durante un encarcelamiento en la Torre de Londres.
Encontramos en diarios británicos del siglo XVIII noticias que se intercambiaban cartas de amor en este día. En el siglo XIX, en Estados Unidos aparecieron fábricas que producían tarjetas y postales de amor.
Su precursora fue Esther A. Howland; puso a la venta tarjetas con tintes románticos; las vendía en la librería de su padre. Fue un éxito rotundo extendiéndose por varios continentes.
Pudo más el sentimiento del amor. Se quedó sin patrón y se convirtió en un día estupendo para la sociedad del consumo.
¡No hay que alarmarse! El celebrar un día "al amor" es un tema reflexivo. Así lo plasma en su lírica Antonio Rey Soto (Mercedario).
¡Alma mía, alma mía, pobre oruga
de inmortal mariposa, es Primavera!
¡Ha pasado el Amor!... ¡En los linderos
los rosales llamean,
y tu triste capullo, el barro humano,
para dejarte paso ya se agrieta!...
¡Al sol, ánima mía;
al sol las alas nuevas!
¡Y arriba.., ¡más arriba!, que los cielos
son mezquino dosel a tu grandeza!
(Antonio Rey Soto).
¡Que esta festividad sea de roja rosa, luciente, emanado aromas de sinceridad, de amistad, de hermandad!
Pedro de Lorenzo y Macías.