La marea blanca de pellets está extendiéndose por la Ría de Pontevedra. El martes se detectó su presencia en playas de Sanxenxo y este miércoles llegó también a Poio y Marín.
En Poio, el Concello confirmó que detectaron las primeras bolitas de plástico en las playas de Xiorto y Raxó. "Por el momento es algo muy puntual, muy poca cantidad", aclaran, pero pusieron en marcha tarea para su retirada.
Así, los voluntarios de Protección Civil ya procedieron a su retirada y el Concello se mantiene "vigilando muy de cerca", pues en las próximas horas las mareas se incrementarán de manera importante y pueden traer más microplásticos a la costa.
Desde el Concello indican que ya trasladaron esta información a las cofradías de pescadores y a las agrupaciones de mariscadoras.
En Marín, a las tres de la tarde de este miércoles el Concello dio a conocer que había detectado los primeros pellets en A Coviña y en la parte de la playa de Lapamán que pertenece a Marín.
Los concejales Marián Sanmartín y Pablo Novas, junto con el personal de Limpieza del Concello, hicieron durante la mañana un recorrido de supervisión y vigilancia y localizaron estos granulados.
Desde el Concello, se pondrá en marcha un protocolo de trabajo y limpieza y seguirán haciendo un repaso diario a las playas para poder detectar cualquier nuevo rastro.
Según la información oficial, se alertó al 112, que a su vez dio aviso al Servicio de Guardacostas, y a la Policía Local.
La alcaldesa de Marin, María Ramallo, asegura que "trabajaremos en la coordinación de la limpieza para actuar con rapidez".
En la Ría de Arousa, el alcalde de Vilagarcía, Alberto Varela, reunió a todos los servicios que pueden verse implicados ante una hipotética llegada de restos de pellets al litoral del municipio este fin de semana, una posibilidad que no se puede descartar teniendo en cuenta el giro del viento al sur.
Se decidió establecer una serie de pautas a seguir en caso de que la contaminación llegue a las playas locales. Por esa razón, desde Emergencias se hará un seguimiento exhaustivo del estado del mar y de los arenales con tres inspecciones diarias, una a primera hora de la mañana y otras dos al fin y al final del día de acuerdo con el funcionamiento de las mareas.
En caso de que fuera necesario intervenir, todos los servicios y la empresa concesionaria lo harán de manera coordinada. Solo en el caso de gravedad se recurriría al voluntariado. Con todo, desde el Concello se ruega al vecindario que, en caso de avistar algún resto, de cuenta de él a los servicios de Emergencias a través del teléfono 112, de manera que toda la información esté centralizada. El martes, las emergencias locales recibieron un aviso que finalmente resultó una falsa alarma.