El Día de la Policía, con nombre propio, de la viuda de un condecorado a un 'héroe' de 93 años
Por Natalia Puga
Genma Larriba desató el gran aplauso de la festividad del Día de la Policía en Pontevedra. A medida que subía las escaleras que conducen al escenario del Centro Social Novacaixagalicia con su hija de cuatro meses en brazos el público se iba levantado. Cuando el comisario jefe de la Policía Nacional, Guillermo Sánchez, le impuso al bebé la condecoración, todo el auditorio estaba en pie y aplaudiendo, algún que otro con lágrimas en los ojos.
Genma Larriba no es policía, pero fue la protagonista de la jornada. Su marido, José Manuel Rodríguez Piedras, sí lo era. Falleció en verano por una grave enfermedad, tan sólo tres días después de que naciese su hija Lucía. El Ministerio del Interior aceptó concederle la Cruz al Mérito Policial a título póstumo propuesta por sus compañeros y mandos policiales y su viúda, a pesar del mal momento que está atravesando, aceptó ir en persona a recogerla.
Subió al escenario visiblemente emocionada y trasmitió su emoción a los presentes. Ya entre el público, recordaba emocionada a su marido, que tan sólo pudo tocar a su hija antes de fallecer, y agradecía que, "después de tantos años como policía, le hayan dado este mérito".
Su persona representa el espíritu de todas las Medallas al Mérito Policial entregadas por el día de su patrón, los Santos Custodios, con las que se premia la dedicación de los agentes en acto de servicio, pero también "a sus familias, sin las que no sería posible nuestro trabajo", como recordaba el comisario jefe.
El subdelegado del Gobierno, Antonio Coello, elogió a unos y otros recordando que este patrón "debe tener también como objetivo recordarnos a todos que, ustedes, miembros de la Policía Nacional, son un pilar básico en nuestra sociedad. Una sociedad que no sería lo que es sino fuera por su trabajo y su profesionalidad".
Asiento privilegiado para un policía jubilado tras 32 años de servicio
José Ramón Fernández Álvarez es otro de los nombres propios de este homenaje 2012 en el que los policías nacionales fallecidos en acto de servicio el pasado enero en la playa coruñesa de Orzán recibieron un sentido homenaje de sus compañeros. Este jubilado del Cuerpo de 93 años recibió una condecoración especial.
Presenció el acto en un asiento privilegiado a la izquierda de las autoridades policiales y judiciales que lo presenciaron. Un reconocimiento a los 32 años de servicio (1943-1975), que en sus años previos a la jubilación estuvo destinado en Pontevedra, pero también desempeñó su labor profesional en la frontera con Francia o en A Rúa de Petín (Ourense).
Acto con carácter reivindicativo
Los policías pontevedreses celebraron su día con la mirada puesta en sus 'héroes' de 2012, pero sin olvidar la situación que atraviesan como trabajadores públicos en tanto que afectados por reducciones de salario, de personal y de recursos. Representantes del Sindicato Unificado de Policía (SUP) pusieron la nota discordante del acto reivindicando que "ante este Gobierno que nos ha engañado, que han mentido, que no cumplen sus promesas, y que si parecía casi imposible superar en errores a los anteriores gobiernos socialistas en los meses que lleven en Interior lo están consiguiendo sobradamente".
Una decena de trabajadores irrumpieron en el acto con un acto simbólico, pegando en sus camisetas el lema 'Robo a la Policía'. Con este gesto y un manifiesto hecho público horas antes denunciaron que "hay nepotismo, amiguismo, enchufismo, sectarismo, corruptelas, y no hay rigor, profesionalidad, respecto a los procedimientos establecidos y entre ellos, a las organizaciones sindicales que deben velar por el respeto de los derechos de los miembros de la Policía".
Descenso de la delincuencia
El comisario jefe y el subdelegado del Gobierno de Pontevedra, Antonio Coello, pusieron el contrapunto a estas críticas. El primero reconoció que "vivimos tiempos especialmente complejos, difíciles", pero arengó a todo el cuerpo y pidió "respeto por nuestro trabajo de cumplir y hacer cumplir la ley".
Antonio Coello apovechó para recordar que la jornada festiva, "también debe servir como punto de encuentro entre la Administración, las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y la sociedad civil". Y para poner cifras a la labor policial: "Las cifras nos indican que estamos en el buen camino. Nuestra provincia, de enero a junio de este año, registró un 5,6% menos de delitos y faltas con respecto al mismo período de 2011, incluso por encima de la media gallega que se sitúa en el -3 %".