Freno a la ordenanza 'antilombos': Sería un "retroceso importante" para Pontevedra, según el Concello

Pontevedra
12 de diciembre 2016

La modificación de la ordenanza de circulación de Pontevedra no seguirá adelante, al menos en los términos previstos. El gobierno municipal ha vetado la tramitación de esta normativa, conocida popularmente como 'antilombos'. Así lo ha anunciado este lunes la concejala de Seguridad Ciudadana, Carme da Silva, basándose en informes técnicos

Lombos
Lombos / Mónica Patxot

La modificación de la ordenanza de circulación de Pontevedra no seguirá adelante, al menos en los términos previstos. El gobierno municipal ha vetado la tramitación de esta normativa, conocida popularmente como 'antilombos'. Así lo ha anunciado este lunes la concejala de Seguridad Ciudadana, Carme da Silva, basándose en informes técnicos.

Carme da Silva ha explicado que todos los informes preceptivos para poder aprobar esta ordenanza son contrarios a su contenido. En este sentido, ha citado expresamente los realizados por el intendente de la Policía Local, el arquitecto municipal y el ingeniero municipal que coinciden en que ocasionaría problemas de seguridad y accesibilidad en la ciudad.

Además, los tres informes determinan que la aprobación de esta normativa conllevaría un incremento "enorme" del gasto económico para el Concello, al tener que "retocar" casi todos los lombos que hay en la ciudad para adaptarlos a la normativa de Fomento, unos para bajarlos, otros para subirlos y otros que habría que rehacerlos enteros junto con las aceras.

En todo caso, la edil del BNG ha reiterado que esta normativa estatal "non está pensada" para las calles de una ciudad, en donde se debe apostar por un calmado del tráfico y por una prioridad peatonal, sino para "outro tipo de vías" en las que haya que apostar por el vehículo. Sería, por lo tanto, "incompatible" a la hora de aplicarse en Pontevedra.

Esta decisión será trasladada al servicio de Intervención y al secretario del pleno. A este último se le pedirá también un informe sobre la presunta ilegalidad del procedimiento seguido para aprobar esta normativa, al haberse hecho por urgencia, tener informes negativos y no dar audiencia a entidades implicadas en esta modificación legal.

Más allá de esta cuestión, Carme da Silva ha reiterado que con esta ordenanza el PP, con el apoyo del resto de la oposición, tenía como objetivo "clarísimo" ir en contra del modelo de ciudad de Pontevedra "atacándoo directamente" en sus pilares principales, basados según el gobierno en la accesibilidad universal, la seguridad vial y la prioridad peatonal.

De aprobarse una modificación de la normativa de circulación como la planteada Pontevedra sufriría, según Da Silva, un "retroceso importante" y los populares provocarían un "deterioro evidente" en los espacios públicos de la ciudad.

Por ello, la concejala del BNG ha adelantado que el Concello seguirá poniendo todos aquellos reductores de velocidad "que se consideren precisos" para mejorar la seguridad vial de la ciudad. Lo contrario sería, comparándolo con la sanidad, una "neglixencia" por parte del gobierno municipal porque "cando algo se pode evitar non é un accidente".

"Se sabes que hai algo que fai que se reduzan os accidentes e desaparezan as mortes nas estradas e non o fas, estás incumprindo as túas obrigacións", ha añadido Da Silva. "É como se hai un medicamento que cura unha enfermidade e non llo dás ao paciente que a padece".