Una alerta ciudadana ha permitido a la Guardia Civil capturar ‘in fraganti’ a un hombre de 45 años, vecino de Poio, intentando robar en una tienda de ultramarinos del municipio.
Según ha informado el instituto armado, los agentes le sorprendieron cuando pretendía entrar en el establecimiento.
Al llegar al lugar, encontraron al ladrón saltando desde un banco del mobiliario público para alcanzar una ventana de ventilación del establecimiento.
Los hechos, que sucedieron el pasado fin de semana, fueron advertidos por los vecinos por el fuerte ruido que provenía de la calle en plena madrugada.
En el momento de su detención, el hombre llevaba una tenaza oculta entre la ropa. Los investigadores comprobaron además que el gato mecánico que había utilizado para forzar las rejillas de la ventana lo había arrojado al interior del establecimiento al percatarse de la llegada de la Guardia Civil.
El detenido, que ya tenía antecedentes por hechos delictivos de similares características, fue puesto a disposición del juzgado de instrucción número 3 de Pontevedra, que decretó su libertad provisional con cargos.
Está acusado como supuesto autor de un delito de robo, en grado de tentativa.