Malestar vecinal por la ocupación de la "Casa de Crucita" por parte de una pareja de toxicómanos
Por Oskar Viéitez
Un grupo de vecinos de Marín ha trasladado a PontevedraViva su malestar y preocupación por el estado de abandono que presenta la "Casa de Crucita". Una situación que se ha visto agravada tras la reciente ocupación ilegal por parte de una pareja de toxicómanos de este céntrico inmueble.
Las dos casas familiares situadas en el número 12 de la calle del Sol de Marín fueron donadas "con reserva de usufructo" a la Xunta por una mujer que se llamaba María de la Cruz Gómez Solla. Las cedió en el año 1997 con el compromiso de que se destinaran a Centro de Menores. Las condiciones de los inmuebles parecían idóneas por el gran espacio que ocupan situado en el centro urbano de la localidad.
Entonces la Consellería de Familia, Mujer y Juventud las convirtió en un centro de acogida de menores desprotegidos o en situaciones de riesgo, llegando a haber un total de 13 niños viviendo en Marín. Pero años después, en el 2006, la Xunta lo cerró.
La "Casa de Crucita", como la conocen los marinenses, quedó vacía excepto el bajo que ocupa la tienda de trajes de novias y ceremonias, Xobema.
Según explican los vecinos, desde hace aproximadamente un mes la casa viene siendo ocupada por una pareja de toxicómanos, "al parecer el varón se dedica a la venta de chatarra y ella ejerce funciones como gorrilla en el aparcamiento público del paseo del puerto de Marín", anexo a la Escuela Naval Militar. Con estos moradores vive también un perro de gran tamaño que pasa las noches durmiendo en el balcón del primer piso de la casa.
La indignación de los vecinos que viven y pasean tanto por Rúa do Sol como por Rúa do Forno es enorme, dado que habitualmente ven a los dos "okupas" entrar en dicha casa por una puerta anexa a la tienda de moda Xobema, "estos dos individuos forzaron la puerta y pusieron una cadena y un candado de su propiedad, por lo que sólo ellos tienen acceso al interior".
Los vecinos pueden observar como el interior del inmueble se encuentra lleno de excrementos de perro lo que provoca un gran foco de infección en la zona y como se han llevado parte del mobiliario de la casa, "posiblemente para empeñarlo en la venta de chatarra".