El paso por el puente de O Burgo, a partir del 7 de marzo, estará prohibido a los coches
Por Alejandro Espiño
El tráfico en el puente de O Burgo tiene los días contados. Y nunca mejor dicho. A partir del jueves 7 de marzo, ya no se permitirá el paso de los vehículos. Las obras de peatonalización del puente ya son inminentes y los trabajos comenzarán este mismo martes, según ha anunciado el gobierno municipal.
Tras una reunión técnica con los responsables de estos trabajos, la UTE Imesapi - EC Casas, el edil de Mobilidade, Demetrio Gómez ha explicado que las obras comenzarán con el desmontaje de la rotonda de la cabecera norte, en las inmediaciones de la gasolinera, entre Domingo Fontán, la Avenida da Coruña y Juan Manuel Pintos.
El objetivo es mantener la circulación en los dos sentidos de circulación uniendo Juan Manuel Pintos con Domingo Fontán y los vehículos que lleguen desde la Avenida da Coruña deberán dirigirse obligatoriamente hacia el puente de las Corrientes.
Además, se realizarán tareas previas de acopio de material y, antes de empezar, se realizará una inspección visual por debajo del puente de O Burgo para observar su estado. También esta misma semana se trabajará ya en la limpieza de toda la estructura.
No será pues hasta el jueves 7 cuando se corte al tráfico el puente definitivamente. Eso sí, durante las obras se mantendrá el paso de los peatones, siempre que sea posible.
Al mismo tiempo, supervisados por el arqueólogo municipal, se harán una serie de catas en el puente para comprobar qué tipo de hormigón se colocó en reformas previas y calcular el peso que puede soportar la estructura. A partir de ahí se demolerán las aceras y se comenzará a trabajar en la reforma en superficie.
En una segunda fase la empresa Setga se encargará de renovar toda la iluminación del puente, aunque parte de su trabajo se realizará al mismo tiempo que la obra civil, ya que las nuevas barandillas tendrán una pieza específica con la iluminación incorporada.
El proyecto de la iluminación se desarrollará en tres fases: una superficial rasante, con puntos azules que marcarán el Camino de Santiago; otra rasante embutida en la baranda dirigida hacia el tablero para que los peatones puedan ver por donde pasan; y una tercera que dará luz a los arcos por el exterior e interior.
El Concello recuerda que las obras de peatonalización del puente de O Burgo tendrán una duración de un año y, además de crear una plaza pública en la cabecera norte, también se actuará en el entronque con la plaza Valentín Garcia Escudero.
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