Luís Bará accedió a la corporación de Pontevedra en 1995, un mandato en el que el Bloque Nacionalista Galego todavía era grupo de la oposición. Antes había sido candidato en el municipio de Vilaboa. En las siguientes elecciones municipales, la formación nacionalista accedía al gobierno local por primera vez, donde siguen veinte años después. Habla del programa de aquel 1999 como "una biblia" que sigue siendo la guía de la acción de gobierno.
En estas dos décadas, tuvo un paréntesis para dedicarse a la política autonómica durante el bipartito de Touriño y Quintana, entre 2005 y 2009; retomando la actividad municipal como concejal no electo en 2011. En el siguiente mandato se reincorpora a la corporación tras las elecciones.
Desde 2016 ha estado compaginando su cargo como concejal y como diputado en el equipo de Ana Pontón. Su presencia fue testimonial en la última convocatoria electoral ocupando el número de cierre de la candidatura. Esperan meses de intenso trabajo, dice en PontevedraViva Radio de cara las autonómicas de 2020.
Repasamos en el Cara a cara el momento más dulce y el más duro en sus responsabilidades locales; de los proyectos de los que más satisfecho está y los que le gustaría haber concluído, de renovaciones y ausencias en la formación nacionalista de Pontevedra. Dice sentirse más a gusto en la política más cercana, la local; y aunque ahora lo que le ocupa es el Parlamento gallego, no ha dicho un adiós definitivo al Concello.