El SUP alerta de un "elevado" número de casos de acoso sexual y laboral en la Policía Nacional que no se denuncian
Por Anxo Lourido
El Sindicato Unificado de Policía (SUP) ha presentado este lunes en Pontevedra el informe sobre el clima laboral en la Policía Nacional, un estudio realizado por las Universidades de Vigo y de Santiago en las comisarías de Galicia con un perfil de muestra conformado por un 81,4% de hombres y 18,6% de mujeres agentes del cuerpo. El informe, según explicaba Carlos Ferro, docente de la Universidade de Vigo, se realizó a partir de 200 preguntas que fueron respondidas por 170 personas durante más de media hora.
Roberto González, secretario general del SUP en Galicia, entiende que se trata de un estudio que refleja datos reales porque los participantes dedicaron tiempo a contestar a la encuesta y se realizó de forma "razonada".
Uno de los datos que llaman más la atención en este informe es el que se recoge en el apartado de las perspectivas de género en el que se analizan los comportamientos verbales, no verbales, físicos no deseado de índole discriminatorio, sexual, moral o institucional. El 48,8% de los encuestados declara haber vivido de forma directa o indirecta diferencias de trato por razón de sexo. Además, el 68,3% considera que el género masculino o femenino del funcionariado influye a la hora de acceder a determinados puestos de trabajo. El 39,4% de las personas encuestadas ha tenido conocimiento de acoso laboral en la Dirección General de la Policía.
Sandra Fernández, secretaria provincial del SUP, señalaba que se inician muy pocos trámites por casos de acoso o de discriminación, solo se han registrado 14 en cuatro años en todo el Estado y solo uno de estos casos de acoso laboral acabó en sanción. Esto provoca que sean pocas las personas de la Policía Nacional que se atrevan a denunciar. "Las compañeras cuando tienen una situación de discriminación prefieren cambiar de puesto de trabajo antes de iniciar el trámite porque normalmente no es favorable", indicaba Sandra Fernández, que afirmaba que no se detecta un gran número de casos de acoso laboral ni sexual aunque sí es un número "elevado" para el cuerpo policial. En este sentido Roberto González afirma que no funciona el protocolo de acoso laboral y el de acoso sexual no existe.
González señaló que entre agentes de las Unidades de Intervención Policial (UIP) o de la Unidad de Prevención y Reacción (UPR) perdura el miedo a denunciar estas situaciones por temor a sufrir represalias por parte de sus superiores. "Es algo en lo que tenemos que avanzar", apuntó el máximo representante del SUP señalando que se registran situaciones desagradables que merman la capacidad psicológica del funcionariado.
Indican también que la conciliación de la vida familiar es "muy difícil" y que las mujeres en la Policía Nacional son un reflejo de la sociedad con el clásico "techo de cristal", ya que solo un 8,79 alcanza puestos de responsabilidad en la cúpula policial.
Al margen de estos datos, desde el SUP alertan también de que está pendiente la tercera fase de equiparación salarial y esperan que se ejecute en 2020, tal como se comprometió el Ministerio de Interior. Denuncian que el actual pago de dietas está desfasado ya que solo se abonan 47 euros por alojamiento. La encuesta muestra que los policías no se consideran reconocidos por sus superiores y esta situación se muestra en la concesión de las medallas anuales.
Reclaman también más formación en tiro, en conocimientos penales, en inglés o en artes marciales. Piden además mayor seguridad y garantías para sus intervenciones. En este sentido, Roberto González afirma que cuando se suministre pistolas taser será necesario que vayan conectadas a cámaras que garanticen la corrección de las intervenciones en una instrucción judicial.
Alertan del estrés laboral que sufren, de las malas condiciones en Comisarías como la de Vigo. Víctor Vasco, secretario general de Vigo, indica que la sala del 091 supera los 32 grados y que Inspección de Trabajo no puede acceder para registrar estas situaciones. Señalan que precisan chalecos antibalas, uniformes o fundas antihurto o vehículos en condiciones.