El próximo septiembre la Misión Baluarte del Ejército cumplirá un año operativa. Una misión a través de la cual militares del Ejército de Tierra y de la Armada trabajan como rastreadores telefónicos entre contactos estrechos de personas positivas en covid-19. En el caso de Galicia el jefe de la Unidad de Vigilancia Epidemiológica es el comandante Juan Carlos Rodríguez Gómez, con quien charlamos en el podcast 'Mientras esto dure'.
Explica cómo es la formación y procedimiento que están realizando desde hace once meses. El número de rastreadores en cada momento de la pandemia ya refleja su mayor o menor incidencia. Durante este pasado julio, se han duplicado. "Hay relación directa entre cómo evoluciona la pandemia y cómo nosotros la afrontamos con el incremento de efectivos" explica el comandante Rodríguez Gómez añadiendo otro dato: "a finales de junio la media diaria era de dos o tres mil llamadas y este pasado fin de semana se llegó a once mil".
Además estos contactos telefónicos también permiten extraer un perfil de las personas que en cada momento de la pandemia son las más contagiadas. En esta oleada la edad más afectada fluctúa en torno a los treinta años "y es significativo el aumento de llamadas que se hace a adolescentes", reseña en PontevedraViva Radio.
Su función no está exenta de dificultades y por diversa causalidad: "en algunos casos resulta complicado cerrar el círculo de contactos estrechos porque en ocasiones no son personas de esta Comunidad, porque la red de contactos de los jóvenes es más amplia y a veces no saben sus datos concretos. Y otra circunstancia que se presenta a veces es no facilitar todos los contactos para evitar cuarentenas domiciliarias"; actitud que lamenta ya que "flaco favor se está haciendo para atajar la pandemia".
No se contempla un final próximo de esta Misión Baluarte. Mientras tanto "con los rastreadores activos en este momento, estamos en condiciones de cumplir la misión de manera satisfactoria y plena y estaremos atentos a la evolución de la pandemia y las necesidades que tenga la Xunta para afrontar la situación con total capacidad y garantías" concluye el jefe de la Unidad de Vigilancia Epidemiológica de Galicia.