Nueva jornada de protestas de la plantilla de ENCE, tras la anulación por parte de la Audiencia Nacional de la prórroga a la concesión de la pastera.
Los trabajadores, tras el polémico boicot al pregón de las Festas da Peregrina, han dado un paso más este miércoles al cortar el tráfico en dos de los principales accesos a la ciudad por carretera.
Desde aproximadamente las 8.20 horas de la mañana, repartidos en dos grupos y ataviados con sus ya característicos chalecos amarillos, los empleados de la pastera han interrumpido la circulación en la salidas hacia Vigo y Marín, ocasionando importantes retenciones.
En el primero de los puntos se situaron en el nudo de O Pino, mientras que en el segundo se han posicionado tanto en la PO-546 o carretera vieja a Marín y también en la rotonda de la PO-11 cortando el tráfico de la Autovía.
En ambos casos los protestantes, que han habilitado barricadas con quema de neumáticos incluida, sólo han permitido el paso a los camiones cargados de madera que se dirigen a ENCE así como a ambulancias y a personas con citas médicas.
Tras cerca de hora y media y tras asegurarse de dejar encendidas las barricadas, en el caso de O Pino usando también algún contenedor, los trabajadores han comenzado una marcha hasta el edificio de la Xunta de Galicia en Campolongo para continuar después por el centro de la ciudad hacia el Concello y la Subdelegación del Gobierno.