El Pazo Provincial ha acogido este viernes las jornadas de memoria Individuas de dudosa moral, en la que se abordó la represión sexual que sufrieron las mujeres durante la dictadura de Franco.
En el marco de este evento, las participantes reclamaron "verdad, justicia y reparación" para las mujeres, tanto las que sufrieron asesinatos y violaciones directas, para las que fueron alejadas de sus hijos con el robo de bebés o para las recluidas por actitudes consideradas amorales.
Unas y otras, según las ponentes en estas jornadas, sufrieron en general un "sometimiento sistemático" a los varones y la coacción de sus libertades sociales y sexuales.
"É obriga de todas as administracións traballar a reo para acabar coa impunidade dos que mataron, espoliaron, raparon, violaron, afastaron ás mulleres da súa descendencia e converteron o noso país nun cárcere para as nosas avoas", ha subrayado la diputada María Ortega.
Con estas jornadas, la Deputación buscaba denunciar "tanto o silencio imposto sobre os diferentes crimes do franquismo como o relato tramposo transmitido pola ditadura e mantido con total impunidade ata os noso días", que fue "especialmente gravoso" para las mujeres.
Así, participaron expertas en materia de memoria y género como la investigadora María Victoria Martíns, que ha hablado del ideal de mujer franquista sometida a los varones, destinada al matrimonio y la procreación, según las indicaciones de la Sección Femenina, que descartaba el placer sexual y las instaba a "frenar el fervor" mismo dentro del matrimonio.
Hablaron también Llum Quiñonero y Enriqueta Barranco sobre el Patronato de Protección a la Mujer, una institución de corrección moral para mujeres en la que, según denunciaron, se cometieron "crímenes" aún sin juzgar dejando a la iglesia -encargada de su gestión- impune.
Ya por la tarde, se abordó el robo de bebés con la presidenta y la abogada de la asociación Todos los niños robados son también mis niños, que hablaron de las diferentes motivaciones por las que se organizaron las desapariciones forzadas de los menores.
Criticaron que aun hoy la ley estatal sobre bebés robados esté paralizada con enmiendas y valoraciones internas que la mantienen bloqueada y que van contra el espíritu mismo de la nueva ley. Por su parte, Marga Rodríguez acercó su visión como hermana de un bebé robado.
El último relatorio ha corrido a cargo de la activista Nanina Santos, que ha subrayado que las relaciones de mujeres lesbianas en el régimen fueron totalmente invisibilizadas por ser la "mayor transgresión contra el franquismo y sus valores".
Estas jornadas se cerraron con la proyección del documental Sacar a la Luz. Memoria de las rapadas, presentado por una de sus directoras, Lola Martín- Consuegra Martín-Fontecha.