Roba una furgoneta en Pontevedra, la conduce sin carnet y explica a la Guardia Civil que unos rusos le obligaron a subirse a punta de pistola
Por Natalia Puga
Un hombre acaba de ser condenado por un doble delito de hurtar una furgoneta y conducirla a pesar de que le habían retirado el carnet. En su caso, además, cuando la Guardia Civil le dio el alto, utilizó excusas llamativas como que le habían prestado la furgoneta, que le había recogido haciendo autostop un ciudadano marroquí o incluso que unos ciudadanos rusos lo habían obligado a punta de pistola a subir a ella.
El caso llegó a juicio en el Juzgado de lo Penal número 1 de Pontevedra y acabó en condena, pero el acusado recurrió y ahora la sección segunda de la Audiencia Provincial rechazó su recurso y acaba de volver a confirmar el fallo condenatorio.
El ladrón deberá cumplir nueve meses de prisión por el delito de hurto de uso de vehículo y una multa de 2.160 euros por un delito contra la seguridad vial en su modalidad de conducción sin permiso.
Ambas sentencias consideran probado que el 26 de septiembre de 2019 sobre las 6:50 horas robó una furgoneta Citroën Berlingo que su dueño había dejado aparcada en la calle Padre Gaite de Pontevedra.
Tres días después, el 29 de septiembre, sobre las doce y media de la madrugada, agentes de la Guardia Civil de A Estrada lo identificaron como conductor de esta furgoneta en la avenida de Pontevedra de A Estrada y le llamaron la atención por tener la música demasiado alta. Él procedió a bajar el volumen y abandonar el lugar.
Horas más tarde, sobre las tres de la madrugada de ese mismo día, los mismos agentes se encontraron de nuevo con él en la avenida da Torre de A Estrada y le dieron el alto al realizar una maniobra irregular. Al igual que antes, el conductor de la furgoneta era el acusado, que fue detenido al comprobar que la furgoneta figuraba como sustraída y él carecía de permiso de conducir.
En su recurso, pidió que la multa por conducir sin permiso fuese sustituida por 31 días de trabajos en beneficio a la comunidad, pero el tribunal de la Audiencia le recuerda que no compareció en el juicio, que era donde habría podido manifestar su deseo en ese sentido.
El tribunal de la Audiencia Provincial también recrimina al acusado y a su abogado defensor que no acudió ala vista oral y pretende recurrir recuperando su declaración en fase de instrucción, en la que manifestó que había hecho autostop y lo había recogido un señor marroquí con acento francés que iba conduciendo la furgoneta y lo había llevado hasta A Estrada. Una vez allí, según su relato en instrucción, el conductor dejó la furgoneta y le dijo que podía quedar con ella para dormir, y ahí fue cuando ya apareció la Guardia Civil.
Aparte de la "incorrección e inutilidad de tal manera procesal de proceder", el magistrado de la Audiencia, José Juan Barreiro Prado, insiste en que "ni tan siquiera cuadraría esta versión con la que dieron los dos agentes", que, en el juicio oral, declararon que el acusado les dijo que le habían prestado la furgoneta e incluso que unos rusos lo habían obligado a punta de pistola a subir a ella.
Un año antes, el 14 de septiembre de 2018, el Juzgado de Instrucción número 3 de Pontevedra le había condenado como autor de un delito de conducción bajo la influencia de bebidas alcohólicas a la pena, entre otras, de privación de derecho a conducir vehículos a motor y ciclomotores durante dos años. Esa pena seguía en vigor en el momento de los hechos, pues se extinguía el 12 de septiembre de 2020.