El estreno de la feria ambulante en la Avenida de Buenos Aires, previsto por el Concello para este sábado 30 de septiembre, será un fracaso. Así lo asume el gobierno municipal, que cree que los feriantes mantendrán su negativa a trabajar en esta nueva localización.
La responsable de Promoción económica, Anabel Gulías, asegura que sigue con la "man tendida" a los ambulantes, a los que les ofrece su "disposición absoluta" para mejorar su colocación en Buenos Aires y ajustar los criterios técnicos.
A pesar de que los feriantes, previsiblemente, no acudirán este sábado, el Concello ultima el dispositivo que se activará para permitir la celebración del mercadillo, cerrando al tráfico desde el Puente de las Corrientes al Puente de Santiago.
En los próximos días se marcarán sobre la calzada, concretamente sobre la acera y la medianera de la avenida, el sitio que ocuparán los puestos y se definirá todo el dispositivo de movilidad y seguridad, que está redactando la Policía Local.
El Concello plantea instalar los puestos de la feria en los dos carriles más próximos al río, ocupando además parte de la acera, mientras que uno de los carriles frente a la plaza de abastos se reservará para estacionamiento de las furgonetas de los ambulantes.
El último carril, pegado al mercado, quedará abierto para el acceso al aparcamiento subterráneo y para servicio de la propia actividad de la plaza de abastos.