Siete mil árboles para reducir las cianobacterias y las inundaciones en los ríos Umia y Gallo

Umia
20 de noviembre 2023

La Xunta de Galicia plantará unos 7.000 árboles de especies autóctonas en la ribera del río Umia para recuperar la vegetación fluvial, evitar la proliferación de cianobacterias en el agua y reducir el riesgo de inundaciones. Este plan de restauración fluvial se extenderá también al río Gallo

Presentación del plan de restauración fluvial de los ríos Umia y Gallo
Presentación del plan de restauración fluvial de los ríos Umia y Gallo /

La Xunta de Galicia plantará unos 7.000 árboles de especies autóctonas en la ribera del río Umia para recuperar la vegetación fluvial, evitar la proliferación de cianobacterias en el agua y reducir el riesgo de inundaciones.

A esta iniciativa, que ha anunciado este lunes la conselleira de Infraestruturas e Mobilidade, Ethel Vázquez, en Moraña, el gobierno gallego destinará casi dos millones de euros.

Vázquez ha explicado que este plan de restauración fluvial, que se extenderá también al río Gallo, uno de los afluentes del Umia, busca contribuir a mejorar la calidad de las aguas y de los ecosistemas asociados a estos dos lechos fluviales.

Las actuaciones, que ejecutará la empresa pública Seaga, se centrarán en mejorar la calidad del suelo con nuevas plantaciones y recuperación de zonas degradadas, mediante la eliminación de especies invasoras.

También se consolidará el bosque de ribera por ser formaciones vegetales con alto valor ecológico y ambiental y ser fuente de biodiversidad, incrementando al mismo tiempo la retención de agua de escorrentía, minimizando su aporte a los ríos Umia y Gallo.

Dentro de los cauces, en las zonas más degradadas o que muestren problemas de erosión, en las que no se pueda actuar directamente, será necesario emplear técnicas de bioingeniería.

Se retirarán los obstáculos que impidan el libre discurrir del agua, desde árboles caídos hasta madera muerta, piedras o tierras procedentes del colapso de taludes.

La conselleira ha subrayado que estas intervenciones son fruto de diferentes estudios realizados por la Xunta, uno de ellos centrado en la cuenca del río Umia y de sus afluentes para mejorar su calidad, que concluyó que la calidad de su bosque de ribera "no llega a ser óptima".

Estos bosques, ha detallado Ethel Vázquez, funcionan como "filtro verde" del río, al evitar que lleguen a sus aguas elementos derivados de la actividad humana que las altera y ayudar a evitar desbordamientos, que suelen ser habituales en esta zona en época de lluvias.

Estas intervenciones supondrán actuar sobre 21 kilómetros del río Umia y 14 del río Gallo y serán ejecutadas en el marco del plan de recuperación, transformación y resiliencia, financiado por los fondos Next Generation de la Unión Europea.