Acercar al público infantil a la música es uno de los principales objetivos de estos conciertos didácticos que ya se habían llevado a cabo en anteriores ocasiones, como el año pasado, dentro del ciclo ‘Mujeres e inspiración’.
Vienen este año con una temática diferente de la mano de la Sinfónica de Pontevedra, para dar a conocer al alumnado de la ciudad una de las piezas musicales infantiles más relevantes de la historia de la música: ‘El Carnaval de los animales’ de Saint Saëns. El espectáculo, con su refuerzo audiovisual, trabajará también la educación emocional.
Cada pase del concierto didáctico tendrá una duración de 45 minutos máximo, tiempo adecuado para la edad del alumnado. A través de la historia de un pequeño animal, desconocido para el público, que quiere saber como es, se trata de hacer llegar la idea de que cada uno de nosotros es único e irrepetible, aunque me los sea inquietos como los canguros o sabios como las tortugas.
Este pequeño animal será un títere que ayudará al público a comprender trazos de la personalidad a través de sus amigos: los animales del Carnaval. Estos animales aparecerán en escena a través de las creaciones audiovisuales en directo, con técnicas muy variadas, a cargo de Montse Piñeiro.
Las escuelas de educación infantil Crespo Rivas, Fina Casalderrey y O Vao, colegios como las Xuqueiras 1 y 2, Campolongo, Álvarez Limeses, Barcelos,San José, Marcón, San Martiño de Salcedo, Santo André de Xeve, Parada de Campañó, Vilaverde – Mourente, San Benito de Lérez, el instituto Valle Inclán, serán alguno de los centros que pasarán a lo largo de las mañanas del miércoles 7, jueves 8 y viernes 9 de febrero por el Teatro Principal de Pontevedra para disfrutar y aprender.
SOBRE ‘El CARNAVAL DE LOS ANIMALES’
A obra central del concierto (en francés, Lee carnaval des animaux) es una suite formada por 14 movimientos compuesta por el francés Camille Saint Saëns. Se estrenó el martes de carnaval de 1886, y el compositor apareció disfrazado con nariz y barba postizas, ya que para él era una obra a modo de parodia o sátira, para ridiculizar a compositores e intérpretes de la época. La interpretó una vez para su amigo Liszt y después prohibió su publicación e interpretación; la única pieza que se pudo interpretar fue “El Cisne”. Para este movimiento, la bailarina Anna Paulova creó una danza “La muerte del cisne” por la que es muy reconocida. Hasta su fallecimiento, no volvió a ser interpretada, y se convirtió en una de sus obras más importantes.