Álex Andión rompe barreras para el waterpolo gallego como campeón de la Supercopa con el Sabadell

Pontevedra
14 de octubre 2020

El deportista pontevedrés, canterano del Waterpolo Pontevedra, se ha convertido en el primer gallego en levantar un título absoluto en el waterpolo nacional, al conseguir con el Sabadell la Supercopa de España

Álex Andión, jugador pontevedrés de waterpolo que milita en el CN Sabadell
Álex Andión, jugador pontevedrés de waterpolo que milita en el CN Sabadell

Apenas lleva un año en Cataluña y Álex Andión ya ha derribado una barrera para el waterpolo pontevedrés y gallego, la de levantar un título nacional.

Aunque su presencia fuese testimonial, el canterano del Waterpolo Pontevedra lo consiguió con el equipo absoluto del CN Sabadell que venció en la Supercopa de España disputada el fin de semana al superar al Atlético Barceloneta y al CN Barcelona. 

Pese a ser todavía juvenil de último año, Álex se entrena a diario en uno de los clubes de mayor potencial y tradición de Europa, rodeado de grandes campeones. "Hay un campeón olímpico, subcampeones de Europa, del Mundo... la verdad es que poder entrenar con gente de ese nivel es un sueño", reconoce.

Por el momento su labor se centra en el equipo juvenil y en completar alguna que otra convocatoria con el bloque absoluto, con el que se ejercita, y es que "este año he dado un gran paso al poder compartir vestuario con el primer equipo, con grandes jugadores, y he tenido la suerte de poder haber recibido esta medalla", señala sobre sus últimos avances.

Aún así, y con los pies en el suelo, sabe que le queda mucho camino por recorrer, por lo que su objetivo no es otro que "ir día a día, entrenando, dándolo todo y poder hacerme un hueco en el equipo".

El cambio ha sido importante, ya que "hay una gran diferencia del waterpolo gallego al waterpolo de alto nivel que hay aquí en Cataluña. Físicamente es mucho más duro de lo que es el waterpolo gallego, pero luego lo táctico también", explica. Es por ello que "tanto técnicamente como físicamente he tenido un cambio muy grande".

Todo ello en un año tan complicado como el actual por la pandemia de Covid-19, un virus que ya le ha afectado de manera indirecta: "Ya me ha tocado dos veces confinarme, y al final lo que te queda es entrenar en casa mientras no puedas ir a la piscina y al gimnasio y cuando vuelvas meter caña para intentar coger el ritmo lo ates posible".

Pequeñas piedras en el camino en medio de un sueño, el de poder seguir creciendo como jugador de waterpolo para consolidarse en la élite y que "reconozcan que en Galicia también puede haber buenos jugadores". Queda mucho, pero está ya un paso más cerca de conseguirlo.