El Poio Pescamar vuelve a casa. Tres meses después del exilio forzoso al Príncipe Felipe de Pontevedra por las obras en el pabellón de A Seca, las rojillas volverán a ser locales de verdad este sábado a las 17 horas recibiendo en su cancha y ante su público al AD Alcorcón.
El 10 de diciembre del 2022, en la jornada 12, el cuadro conservero vencía por 2 - 0 al Roldán en su último partido en Poio antes de hacer las maletas.
Durante estos tres meses, el primer equipo entrenó entre el Príncipe Felipe y el pabellón de Lourido. En el escenario pontevedrés disputaron cinco partidos, cuatro en liga (victorias ante Marín, Futsi y Teldeportivo, así como un empate con el Viaxes Amarelle) y la semifinal de Copa Galicia, en la que cayeron ante el Burela. "Nos vamos con el gran recuerdo del triunfo sobre el equipo de Navalcarnero, al que nunca habíamos ganado como local", destacan desde la entidad.
El cierre del pabellón de A Seca trastocó también los planes de los equipos de la base. "Desde Lourido o el IES de Poio, hasta el Príncipe Felipe y el CEIP San Benito de Lérez en Pontevedra e, incluso, partidos ejerciendo de local en el pabellón de O Toural, Vilaboa", recuerdan desde el club una diáspora que toca por fin a su fin.
Tras el parón de la liga por la celebración de la Eurocopa, es el momento de afrontar la recta final de la liga, a la que le quedan nueve jornadas por disputar. El objetivo del equipo rojillo es la clasificación para el playoff por el título por primera vez en su historia, para lo que cuentan con una renta de 14 puntos sobre el quinto puesto, que ocupa precisamente el Alcorcón.
Una victoria, además de tranquilidad y tres puntos de oro, supodría romper dos nuevos récords: el de mayor puntuación en Primera División (logrado el curso pasado con 55) y el de más triunfos en liga (en la campaña 2017 / 2018 y en la 2021 / 2022 sumaron 17, los mismos que suman actualmente).