Es la recta final. Ya sólo quedan unos días para que la expedición española parta rumbo a los Juegos de Tokyo en los vuelos organizados por el Comité Olímpico Español (COE). El primer de ellos lo hará el próximo 9 de julio de hecho.
Por ese motivo Javier Gómez Noya ha intensificado su preparación en los últimos días con la segunda de las concentraciones previstas en la isla mexicana de Cozumel, lugar elegido por su equipo para adaptarse al calor y la humedad que se espera para la competición olímpica.
Si en la primera el pentacampeón mundial en distancia olímpica contó con compañeros de entrenamiento como la pontevedresa Saleta Castro junto a David Castro, Víctor Benages y Anneke Jenkins, ahora ha vuelto a tirar de otro deportista pontevedrés para afinar una especialidad que puede resultar decisiva, la carrera a pie.
Se trata del marinense Víctor Riobó, con quien suele ejercitarse en sus estancias en la Boa Vila y al que se ha llevado en esta ocasión hasta Cozumel para intentar lograr la chispa necesaria en el último sector con la ayuda de todo un especialista como el atleta de la Sociedad Gimnástica.
Están siendo "días de trabajo duro", reconoció a través de sus redes sociales el propio Gómez Noya. Todo para llegar en la mejor forma posible al lunes 26 de julio, fecha prevista de la carrera masculina en Tokyo en la que buscará su segunda medalla olímpica. Será además su única cita en los Juegos, ya que finalmente serán Mario Mola y Fernando Alarza los que competirán junto a Miriam Casilla y Anna Godoy en la carrera de relevos mixta.