En la historia del tenis gallego y pontevedrés quedará reflejado el 2016 como el año de la retirada de Lourdes Domínguez Lino.
La pontevedresa, a sus 35 años, puso fin a una carrera de casi 20 años y 1.000 partidos en el circuito internacional que la llevó nada menos que a ser la número 40 del ranking mundial.
Dos torneos WTA y otros 17 ITF, además de un Rolland Garros Junior, adornan las vitrinas de una deportista que se despidió en noviembre con una emotiva rueda de prensa rodeada de amigos y familiares y en una de sus casas, el Club de Tenis de Pontevedra, al que llegó en su momento tras dar sus primeros pasos en el Liceo Casino.
Lourdes aseguró que no había un motivo concreto para poner fin a su carrera pero con "las nuevas generaciones pisando fuerte", y en una temporada en la que se alejó del Top-100 Mundial, seguir siendo competitiva resultaba cada máz más complicado.
Orgullosa de todo lo conseguido y tras un tiempo para "descansar, estar en casa con la familia y amigos, porque ha sido mucho tiempo, muchos años fuera", toca pensar en nuevos retos, quizás trabajando para que el tenis gallego avance y gane peso en el territorio nacional, una labor que "me gustaría", reconoció en su despedida.
En el Club de Tenis, amigos y familiares quisieron rendirle un merecido homenaje con un vídeo en el que se repasan algunos de los mejores momentos de su carrera deportiva, la de la mejor tenista gallega de la historia.