Si a nivel político hay un protagonista del 2015, ese es Miguel Anxo Fernández Lores. En las elecciones municipales de mayo demostró que, actualmente, no tiene rival en las urnas. Con un 43,08% de los votos y doce concejales -el mejor resultado histórico del BNG en la ciudad-, se quedaba a las puertas de la mayoría absoluta. Fue un hito calificado como "espectacular" por el alcalde la misma noche del 24-M.
A partir de ahí, Fernández Lores inició su quinto mandato consecutivo -facilitado por la abstención de sus rivales en la sesión de investidura-, una nueva etapa en la corporación que junto a Partido Popular y PSdeG-PSOE dio entrada a dos nuevas fuerzas políticas, Marea Pontevedra y Ciudadanos. Un inédito panorama político que ha agitado la vida municipal, como se vio en la polémica aprobación de los presupuestos.
Pero también otros asuntos han marcado este inicio de mandato, como el proyecto de planta de compost de A Canicouva, la prórroga solicitada por ENCE para continuar en Lourizán -que provocó la reacción de sus detractores y las continuas movilizaciones de los trabajadores-, o las intervenciones realizadas por agentes del Servicio de Vigilancia Aduanera en relación con las operaciones Patos y Pokemon, en Concello y Deputación.
Fue un año de cambios, en general, en gran parte de la comarca de Pontevedra. Tan solo María Ramallo en Marín, Luciano Sobral en Poio y Jorge Canda en A Lama sobrevivieron al ‘tsunami’ de las elecciones municipales. También se mantuvieron en sus cargos José Luis Poceiro en Vilaboa, Juan Manuel Rey en Caldas de Reis o Félix Juncal en Bueu.
Así, un cuatripartito liderado por Gonzalo Pita (SAL) desbancó al PP de la alcaldía de Sanxenxo y cerró las puertas al regreso de Telmo Martín; Barro eligió por primera vez en su historia a un alcalde del BNG, Xosé Manuel Fernández Abraldes; y en Ponte Caldelas, Perfecto Rodríguez dejó su sillón al socialista Andrés Díaz, tras un acuerdo a tres bandas.
Hubo relevo también en Vilagarcía, O Grove y Cuntis, que volvieron a manos del PSOE con Alberto Varela, José Antonio Cacabelos y Manuel Campos, respectivamente.