Juan Carlos Mascato y Noelia Torrente, son una pareja de emprendedores que después de tres años desde que montaron la empresa Ibérica de Esponjas Vegetales Luffa, presumen de tener clientes en España, Alemania y Australia.
Hasta la finca de A Touza se acercó este lunes el consejero de Economía e Industria, Francisco Conde, que reseñó el potencial innovador en los sectores industrial y cosmético de la xoven empresa de Caldas de Reis, que desarrolla esponjas cultivadas de gran ligereza y resistencia y trabaja para sustituir el uso de fibras sintéticas por fibras naturales.
"Talento gallego" de un producto "capaz de competir a nivel global", destacó Conde ya que no sólo cultiva un producto prácticamente inexistente en Europa, sino que ofrece un ejemplo de viabilidad empresarial en el rural gracias a tres años de investigación para dar con la esponja que cuente con la mejor fibra mediante cruces genéticos, que permitió un producto gallego superior al de la competencia.