La Federación Gallega de Estaciones de Servicio (Fegaes), de la que forma parte la Asociación Provincial de Empresarios de Estaciones de Servicio de Pontevedra, insta a la administración central a estudiar una suspensión de tributos a los empresarios de gasolineras.
Para la mayoría de los propietarios de estaciones de servicio, las medidas aprobadas por el Gobierno sobre los servicios mínimos están empeorando la situación en el sector.
A raíz de la entrada en vigor de la orden en la que se establecen los servicios esenciales que deben cubrir las estaciones de servicio de carburantes y combustibles como consecuencia del estado de alarma, son muchos los empresarios que reprochan que ahora existe menos flexibilización horaria que antes y que la situación para ellos, lejos de mejorar, empeora.
Hasta ahora, los dueños de estaciones de servicio podían ajustar sus horarios, como una manera de paliar el drástico descenso en el volumen de ventas. Sin embargo, la nueva lista de servicios mínimos acaba con esa flexibilidad y obliga a muchas empresas a abrir en determinados horarios, aunque en ellos no haya clientes. Una situación que tiende a agravarse los fines de semana y de manera aún más alarmante en las zonas rurales, se advierte desde la Federación.
La caída en las ventas desde el inicio del confinamiento alcanza, según estimaciones de la Federación Gallega de Estaciones de Servicio, en muchos casos hasta un 90%, llegando a situaciones donde solo un cliente para a repostar en toda una jornada.
Mientras tanto, denuncia Fegaes, los empresarios están obligados a pagar los costes de apertura, salarios y cotizaciones sociales, ya que, al estar catalogadas como servicios mínimos, las gasolineras no tienen derecho a acogerse a un ERTE por fuerza mayor.
Por estos motivos, considera imprescindible que se tomen medidas específicas de carácter laboral, fiscal y financiero que permitan a las empresas gallegas, en su gran mayoría pequeñas empresas familiares, solventar este momento y evitar la quiebra.
En este sentido, demanda que se estudie la posibilidad de una suspensión temporal de tributos como IVA e IRPF, así como la exención total o parcial de IBI e IAE en las estaciones de servicio que acrediten una bajada de más del 75% de sus ventas durante el estado de alarma.
A día de hoy, Fegaes tiene constancia de cinco estaciones de servicio cerradas en la provincia de Pontevedra y una en A Coruña. De momento, no se ha notificado ningún cierre ni en Ourense ni en la provincia de Lugo.