El acusado de matar a un hombre y disparar a otro en Moaña defiende su inocencia

Pontevedra
12 de enero 2016

Jesús J.R.C., conocido como O Briso, no quiso declarar durante el juicio celebrado en la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Pontevedra, pero sí aseguró que no se consideraba autor de los hechos de los que le acusaba la Fiscalía y por los que se enfrenta a 23 años y medio de prisión

Jesús J.R.C., O Briso, acusado de un delito de homicidio y otro de intento de homicidio
Jesús J.R.C., O Briso, acusado de un delito de homicidio y otro de intento de homicidio / Mónica Patxot

Jesús J.R.C., conocido como O Briso, se ha declarado este martes no culpable de los delitos de homicidio, homicidio en grado de tentativa y tenencia ilícita de armas de los que le acusaban por presuntamente disparar a dos hombres que habían acudido a su casa de Moaña, provocando la muerte de uno y dejando herido al otro. El hombre no quiso declarar durante el juicio celebrado en la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Pontevedra, pero sí aseguró que no se consideraba autor de los hechos de los que le acusaba la Fiscalía y por los que se enfrenta a 23 años y medio de prisión.

A pesar de que el acusado no quiso declarar, sí salió a la luz durante el juicio cuál es su visión de los hechos. Los agentes de la Guardia Civil que le atendieron después de su detención el 5 de enero de 2013 indicaron, durante su declaración ante el tribunal, que el acusado les relató que había disparado a los dos individuos, pero que lo había hecho "en defensa propia", pues habían acudido a su casa a "cobrar una deuda" con pasamontañas y un cuchillo. 

Según ha salido a la luz durante el juicio, el acusado decidió entregarse a través de su cuñado horas después del crimen una vez que ya sabía que le estaban buscando como presunto autor de los disparos. Su familiar contactó con un agente y le dijo que él estaba en el coche y quería hablar con alguno de los investigadores. En ese momento, le contó que los dos hombres habían acudido a su casa de madrugada -sobre las 3.30 horas-, llamaron varias veces y, cuando abrió, intentaron agredirlo y él se defendió

Este relato lo reiteró tanto por teléfono a algún amigo como a otros agentes y aseguró que temía por su vida, aunque no con estas palabras exactas, pero sí que que pensaba que le iban a matar, pues iban con al cara tapada y estaban armados. Al lado del cadáver que quedó tirado en las proximidades de su casa apareció un cuchillo, pero nunca llegó a localizarse el arma del crimen, a pesar de que el acusado indicó que había tirado la pistola al mar. 

El juicio, que seguirá el próximo jueves, incluyó en su primera sesión la declaración de F.M.G., el hombre al que presuntamente dejó herido. Tras el incidente, en el que él recibió un disparo, acudió al cuartel de la Guardia Civil para pedir ayuda. En su declaración ante el tribunal este martes, reconoció que fue junto al fallecido a "reclamarle algo" y el acusado acabó disparándoles, en su caso, cuando ya huía hacia el coche.

En su declaración, aseguró que no hubo discusión ni forcejeo, solo disparos. Reconoció que el cuchillo que apareció junto al cadáver de su compañero era suyo, pero matizó que lo usaba "para pescar" y justificó que llevaban una braga náutica que les tapaba la cara porque "hacía mucho frío" aquel día, el 5 de enero de 2013. 

Los investigadores barajan que todo ocurrió entre las 3.00 y las 3.30 horas de la madrugada y las horas coinciden con lo declarado por un vecino de la zona que escuchó hasta siete disparos y, cuando salió a la ventana, vio un cadáver en el suelo. Además, a partir de esa hora, el acusado realizó varias llamadas telefónicas a varios amigos en las que los guardias civiles aseguran que llegó a relatar que dos o tres hombres acudieron a su casa, intentaron atracarle y él, en legítima defensa, les disparó. Esos amigos no lo confirmaron este lunes durante el juicio.