El reparto de los tres millones de euros que, anualmente, se ha comprometido a entregar la empresa Ence a colectivos sociales de Pontevedra, Poio y Marín sigue coleando. Y todo por la negativa de los dos primeros concellos a participar en la comisión de seguimiento del pacto ambiental firmado entre la compañía y la Xunta.
Esta decisión, entienden diferentes asociaciones de Pontevedra y Poio -apoyadas por el PP-, podría provocar que el dinero de Ence no les llegue, a pesar de que desde la empresa han reiterado que aunque estos dos gobiernos municipales no participen de este proceso los beneficiarios de estas ayudas no se verán perjudicados.
En este escenario el Concello de Pontevedra, a través de su portavoz, ha reiterado este lunes que no se sumará al pacto ambiental con Ence y que, por lo tanto, no estará involucrado de ninguna manera en el reparto de estos fondos.
Raimundo González ha explicado que Ence es una empresa privada que "cos seus cartos fai o que quere", por lo que no necesita la "anuencia" de ninguna otra administración pública.
El edil del BNG recuerda, además, que "historicamente" Ence siempre ha subvencionado a diferentes entidades deportivas y sociales de forma directa y no ha necesitado recurrir a los ayuntamientos.
"Será que non queren pagar ou agora están arrepentidos de anunciar que iban a investir eses cartos", ha ironizado el portavoz del gobierno municipal.