La A-57 no tiene "marcha atrás", aseguraba recientemente la ministra de Fomento, Ana Pastor. Su tramitación sigue en marcha y lo hace ahora con un nuevo paso. El Boletín Oficial del Estado ha publicado la licitación del contrato de las obras de construcción del primer tramo de este nuevo vial, que unirá Vilaboa y A Ermida (Marcón). El Gobierno prevé invertir en sus 6,56 kilómetros un total de 86,31 millones de euros.
Se trata de la primera obra que saca a concurso este año el Ministerio de Fomento. Su plazo de ejecución está fijado en 40 meses.
El primer tramo de esta autovía se inicia a la altura del enlace de A Ermida, en la carretera autonómica PO-532, y finaliza en un punto con el que, según Fomento, se propone evitar la Mámoa de San Roman-O Cruceiro.
La autovía tiene proyectados dos enlaces y 15 estructuras, entre los que hay cuatro viaductos sobre el río Pintos, el río do Pobo, el Rego do Barco y el ferrocarril; cinco pasos superiores que resuelven el paso de caminos sobre la autovía y seis pasos inferiores.
El trazado forma parte de la A-57 que, según Fomento, será la vía de gran capacidad alternativa a la carretera N-550 y junto con otros dos tramos, "constituirá la futura circunvalación de Pontevedra". La autovía también dará continuidad hacia el norte a la futura A-59, la vía que discurrirá desde el aeropuerto de Peinador hasta Pontevedra.
Las empresas interesadas en construir este tramo de autovía cuentan con plazo para presentar sus ofertas hasta el próximo 13 de febrero.