La decisión de José Luis Poceiro de abandonar la política tras 20 años en el Concello de Vilaboa, los últimos 16 como alcalde, no ha pasado factura a su partido. El PSOE se ha mantenido como fuerza más votada y podrá continuar en la Alcaldía, ahora ya con Francisco Costa como regidor.
Los socialistas han logrado una mayoría simple de seis concejales, igualando la representación de cuatro años atrás y con un porcentaje de votos prácticamente idéntico. Si en 2015 habían logrado el 41,12% de los votos, tras este domingo electoral han preservado un 40,42%.
El BNG ha sido el único partido castigado por los votantes en estas elecciones municipales. La candidatura encabezada por Ornela Fernández, actual teniente de alcalde, pasa de cuatro concejales a tan sólo tres tras perder 132 votos. Pasó de 985 a 853 y su respaldo bajó del 30,92% al 25,79%.
El tercer partido en liza, el PP que encabeza Alberto Acuña, fue la fuerza con mayor crecimiento, se convirtió en la segunda más votada, pero se quedó a siete puntos de la primera, el BNG.
Los 'populares' mejoraron los resultados de cuatro años atrás al pasar de tres a cuatro concejales. Lograron el 33,04% de los votos, un total de 1.093, frente al 25,83% y los 823 respaldos de la anterior cita con las urnas.
Durante los 16 años de gobierno de José Luis Poceiro, el PSOE gobernó en coalición con el BNG, de modo que todo hace prever que la Corporación que se constituya el próximo 15 de junio también derivará en un bipartito con Francisco Costa y Ornela Fernández como cabezas visibles.