Envían a prisión al hombre que disparó a su ex pareja, se atrincheró en su casa de O Grove y se pegó dos tiros

O Salnés
31 de enero 2019

Llevaba ingresado en el Hospital Álvaro Cunqueiro de Vigo desde el 5 de diciembre, hoy recibió el alta médica, la Guardia Civil pudo detenerlo oficialmente y lo trasladó al juzgado de Cambados. Se le atribuye un delito de homicidio en grado de tentativa y quebrantamiento de una orden de alejamiento previa

Rescate de la mujer que fue agredida por su pareja en O Grove
Rescate de la mujer que fue agredida por su pareja en O Grove / Guardia Civil de Pontevedra

Casi dos meses después de disparar a su ex mujer y atrincherarse en su casa de O Grove, en la que luego se pegó dos tiros, José Antonio P.F. ha recibido este jueves el alta médica y pudo finalmente pasar a disposición judicial por sus acciones enmarcadas en el ámbito de la violencia de género. El juez ha acordado enviarlo a prisión. 

José Antonio P.F. ingresó en el Hospital Álvaro Cunqueiro de Vigo el pasado 5 de diciembre tras haber dejado a su mujer gravemente herida y pegarse él los dos tiros y desde entonces permanecía custodiado, pero aún no había sido detenido legalmente. Según han confirmado fuentes policiales y judiciales, este jueves 31 finalmente pudo ser arrestado al recibir el alta médica. 

Una vez confirmada su alta, la Guardia Civil procedió a su detención y fue trasladado a los juzgados de Cambados, donde entró y salió en ambulancia. Debía comparecer ante el titular del Juzgado de Instrucción número 3, especializado en delitos de violencia de género y que lleva esta causa desde el mismo día de los hechos. Una vez en el juzgado, se acogió a su derecho a no declarar

El juez acordó dictar una orden de ingreso en prisión provisional comunicada y sin fianza como investigado por un delito de homicidio en grado de tentativa por intentar matar a tiros a su mujer y de otro de quebrantamiento de condena porque un juzgado había decretado el 28 de agosto anterior, más de tres meses antes de los hechos, una orden de alejamiento que le impedía acercarse a ella por un episodio previo de violencia de género. 

Tras esa orden de alejamiento, él había regresado a Ourense, de donde era natural, y ella  había cambiado la cerradura del que había sido el domicilio familiar de la pareja, en el que residía, así como el número de teléfono, pero él logró volver a entrar en casa y allí se produjo la brutal agresión en la que resultó herida en el cuello y la cabeza y tuvo que ser trasladada al hospital, si bien recibió el alta dos días después.