La celebración del Primero de Mayo también es para la CIG la conmemoración el Día Internacional de la Clase Obrera, una jornada puramente reivindicativa en la que la central nacionalista saca a las calles la "loita a prol da recuperación de dereitos roubados coa escusa da crise".
El secretario comarcal de CIG Pontevedra, Marcos Conde, reclamó la derogación de las sucesivas reformas legislativas aprobadas en los últimos ocho años por los diferentes gobiernos del PP y del PSOE, desde la laboral, pasando por la de las pensiones hasta la ley mordaza que "criminaliza a mobilización da clase obreira".
Todas ellas supusieron, dijo, una pérdida de derechos laborales, una merma en los salarios, la reducción de la protección y cobertura sanitaria, entre otros efectos negativos.
La situación actual según relató Marcos Conde hace que la pobreza esté relacionada con el trabajo precario y los contratos parciales.
El paro de larga duración en Galicia representa el 58,2 por ciento en la actualidad. En nuestra comunidad quedan fuera del sistema de protección 110.000 personas en situación de desempleo. A día de hoy la tasa de cobertura no supera los 52,7 puntos. También recordó que en estos años más de 130.000 gallegos, principalmente gente joven, marcharon a la emigración buscando trabajo, por lo que si en lugar de emigrar quedaran aquí el desempleo real superaría el 30%.
Al mismo tiempo, señaló que el del Estado español es el único caso en el que el total de los salarios de la clase trabajadora descendió en estos últimos seis años cerca de un 11%. Incluso en Portugal, en este mismo período, los sueldos subieron un 4,45%, mientras que en Alemania y Francia el incremento superó el 9%.
En la marcha convocada por la CIG, que salió a las 11.30 horas, participaron miembros del BNG de los gobiernos de la Deputación y de los concellos de Pontevedra, Barro, Poio y Bueu.