La Deputación de Pontevedra ha asegurado que los concellos más adelantados del Plan Revitaliza han reducido la cantidad de basura de los contenedores verdes que envían a Sogama.
Así lo aseguró este lunes el vicepresidente César Mosquera en el seminario "Otra mirada en la gestión local de los residuos. Tres años de Revitaliza" en el que se ha dado cuenta de los avances del plan provincial ante más de un centenar de representantes de concellos, entidades y personal técnico.
Actualmente hay 42 concellos adheridos al Plan Revitaliza y 13 intentando implantar el sistema de forma global.
Según ha subrayado Mosquera, los centros de compostaje comunitario y composteros repartidos por la Deputación detrajeron ya de los envíos a Sogama aproximadamente unas 3.000 toneladas de biorresiduos en toda la provincia lo que supondría, de estar todos juntos, el equivalente a un municipio de las características de Poio, con unos 11.000 habitantes.
En el caso concreto del Concello de Vilaboa ya redujo un 21% de la basura enviada a Sogama, seguido por los ayuntamientos de O Grove o Pontevedra, que ya empiezan a notar también una bajada en el total de los envíos. Solo trabajando en el orgánico en Vilaboa, por ejemplo, hay un devengo económico de 20.000 euros en las cuentas a Sogama, sin contar con el ahorro económico que a mayores supone no tener que transportar la basura.
En el caso de Pontevedra la técnica Marina Lobelle destacó que el municipio está por debajo del 10% en la recogida selectiva y muy lejos del 50% exigido para 2020. Hasta ahora se llevan producido más de 45 toneladas de compost en los 18 centros de compostaje comunitario instalados, número que se va a ampliar en breve con los centros de A Parda y O Gorgullón y a medio plazo con otros 16.
El objetivo, dijo Lobelle, es que a inicios de 2019 se repartan los 8.000 composteros individuales en el rural y que, entonces se puedan detraer del actual sistema de gestión 10.320 kilos diarios, lo que supondría unas 3.700 toneladas anuales.
El asesor provincial de residuos, Carlos Pérez, hizo hincapié en esta cuestión y, con gráficas mostró la tendencia alcista de basura producida y envíos a Sogama en los últimos años, así como el cambio iniciado en este 2018 ya de manera "notable".
Mosquera también destacó el efecto "simpático" que tiene la separación de los biorresiduos de los plásticos, vidrio y papel, que mejoraron notablemente sus cifras. El reciclaje de estas otras fracciones, de hecho, será abordada en la línea 3 del Plan Revitaliza, ya que se prevé incidir en las frecuencias de los circuitos de recogida una vez el orgánico no esté entre estos, lo que supondrá una bajada total del coste de la gestión de la basura para los ayuntamientos.
También destacó que el Revitaliza tendrá una cuarta línea de trabajo en la que se prevén modificar las ordenanzas y la fiscalidad de la basura con el horizonte de beneficiar a las personas que participan en el compostaje y generan menos residuos.
La consejera técnica del Ministerio de Transición Ecológica, Gema Gonzalo, explicó habrá un límite de 31 de diciembre de 2020 para que los concellos de más de 5.000 habitantes gestionen y traten los residuos orgánicos in situ o los recojan de forma separada para su tratamiento en planta. "El reto que tenemos delante es muy grande porque estamos en 2019 ya y hay amenazas de sanción", subrayó.