Con la reforma de los viales perimetrales de Barcelos pendiente de los "últimos flecos", el gobierno municipal trabaja ya en la segunda fase de esta actuación, que estará centrada en la zona central de la plaza y en el área más próxima al muro del convento de Santa Clara.
Esta fase, según ha explicado el edil César Mosquera, "está pendente" del proyecto definitivo para la rehabilitación del antiguo convento. La idea que se baraja pasa por rebajar la cota en la zona más próxima al muro, para "descargar o empuxe do terreo" contra este cierre.
"O que propoña a Deputación farase", ha sostenido Mosquera, que confía en que sea una "proposta sensata". El objetivo, ha añadido, "non é que quede unha vexetación ou outra senón que Santa Clara teña unha entrada digna" desde la plaza.
El gobierno municipal ofrecerá toda su colaboración para abordar esta reforma y está dispuesto incluso a cofinanciarla para que se haga de manera paralela a la actuación pendiente en Barcelos "para non ter que ir facéndoa a cachos".
Con respecto a las obras actuales, Mosquera estima que concluirán en "tres semanas", tras resolver una serie de "incidencias" como el retraso en la pavimentación por la lluvia o los problemas con una conexión de gas, entre otras cuestiones.