La Xunta aplaudiría la creación de una planta de biomasa de Ence frente a las reticencias del Concello

Pontevedra
15 de enero 2016

El vicepresidente de la Xunta de Galicia, Alfonso Rueda, señala que Pontevedra necesita empleo y que el gobierno local no puede dejar perder puestos de trabajo. La concejala Carme da Silva apuntó que la planta de biomasa de la que habla Ence forma parte de una campaña de propaganda

Ence
Ence / Mónica Patxot

El estudio que Ence ha anunciado para contemplar la creación de una planta de biomasa de 40 megavatios en Pontevedra, con la posibilidad de crear 750 nuevos empleos, ha provocado reacciones encontradas entre las diferentes instituciones. Desde la Xunta de Galicia, el vicepresidente Alfonso Rueda manifestó que este proyecto supondría la creación de muchos puestos de trabajo y recordó al Concello que Pontevedra no se puede permitir perder empleo al ser la ciudad gallega con más índice de paro.

En todo caso, Alfonso Rueda afirmó que este estudio de Ence no significa que la empresa ya tenga garantizada su continuidad en las actuales instalaciones en Lourizán. Indicó que hasta que todo depende del ministerio de Medio Ambiente. Pero insistió en enfocar sus críticas hacia el Concello de Pontevedra alegando que el gobierno de Fernández Lores no tiene problemas en que la empresa se vaya y que se pierdan muchísimos puestos de trabajo, tanto directos como indirectos.

En la misma línea se manifestaba la alcaldesa de Marín, María Ramallo, que entiende que la continuidad de Ence genera un debate profundo y que hay que tener en cuenta a los trabajadores.

Desde el Concello de Pontevedra, la concejala de Medio Ambiente, Carme da Silva, afirmó que la Xunta nunca pone malos ojos a lo que diga Ence y afirmó que este proyecto de la planta de biomasa les parecería correcto si la propuesta se realiza en un suelo propio y no en los terrenos ocupados en la ría de Pontevedra.

En relación al número de puestos de trabajo que se generaría en esa planta, la concejala reclamó rigor a la empresa y se preguntó cuántas plantas de estas características tienen ese número de trabajadores. Como consecuencia entiende que se trata de una campaña publicitaria de Ence y cuestionó la ética de esta propuesta ante la enorme cantidad de parados que existen en la comunidad.

Da Silva insistió en que espera que un gobierno en funciones, en referencia al actual de Mariano Rajoy, no tenga la "osadía" de conceder la prórroga para que la empresa continúe en Lourizán.