Con la entrada en la fase 2 de la desescalada, Pontevedra reabrirá el próximo lunes 25 de mayo las playas del Lérez, Ponte Sampaio y Os Praceres.
El Concello instalará en los arenales unos paneles informativos en los que se recogerán las normas de utilización, entre ellas la necesidad de mantener distancia mínima de seguridad de 2 metros, tanto en tierra como en el agua, y de que los grupos no superen las 15 personas.
Conscientes del incremento de temperaturas que anuncian las previsiones meteorológicas, el gobierno municipal apela al "sentidiño común" de los ciudadanos y les piden que gradúen "en la medida de lo posible" su vuelta a las playas.
Así, esperan que, al contrario de lo que sucedió cuando se aliviaron las medidas de desconfinamiento y se reabrieron las zonas verdes, no se produzcan aglomeraciones en los primeros días.
La Policía Local, en todo caso, vigilará que no se produzcan excesos en esta vuelta a los arenales.
Entre las normas de obligado cumplimiento, se incluye la prohibición de uso de las duchas y fuentes de agua, así como el mantenimiento de la distancia de seguridad dentro de los grupos entre las personas que no compartan domicilio o, en su defecto, la adopción de medidas alternativas de protección física, tanto de higiene de manos como mascarillas para cubrir la boca.
Todos los objetos personales, entre ellas las toallas, deben permanecer dentro del perímetro de seguridad de dos metros, evitando el contacto con el resto de usuarios.
Se permitirá la práctica de actividades deportivas y de ocio, siempre que se puedan desarrollar individualmente, sin contacto físico y guardando los dos metros de distancia de seguridad.