La 'Taponeta' surgida en Pontevedra para promover la recogida solidaria de tapones con los que ayudar a diversas causas sociales se ha sumado ahora a la ola de solidaridad que está inundando la sociedad española ante la situación de emergencia sanitaria derivada del avance del coronavirus. Para hacer frente a las restricciones del estado de alarma y garantizar que la cuarentena colectiva se lleve en mejores condiciones, ofrece sus servicios para ayudar a quien lo necesite.
"Si alguien nos necesita de verdad, ahí estamos", explica el alma de la 'Taponeta', Enrique Magdalena, un periodista pontevedrés que alega sentirse un "privilegiado" en medio de esta situación de emergencia sanitaria y quiere poner su granito de arena para ayudar a los que no pueden moverse de sus casas para cuestiones tan básicas como hacer la compra o ir a la farmacia.
Desde la 'Taponeta' anunciaron a través de Facebook que se ponían a disposición de aquellas personas mayores o con movilidad reducida que necesiten ayuda para sus suministros básicos. "Pueden contar con nosotros, con la Taponeta Solidaria. Aquí estamos", ofrecen.
Este domingo, según explica Enrique Magdalena, ya han recibido una petición de ayuda. Fue de su vecina, una mujer mayor con movilidad reducida a la que durante la cuarentena tendrán que llevarle la comida a casa y que ha pedido a los 'taponeteros' que le lleven yogures naturales para 15 días.
"No es de primera necesidad ni nada, pero si mañana voy al super, le llevo un par de paquetes para tener ahí para 15 días", explica. Aunque parece un gesto sin importancia, para esta vecina de Pontevedra será un mundo poder contar con un producto con el que hacer más llevadera la cuarentena.
El espíritu de esta iniciativa es aprovechar que tres o cuatro personas que se han ofrecido a la 'Taponeta' acuden a hacer la compra o salen de casa para cumplir sus obligaciones laborales para hacer pequeños recados a aquellos que lo necesitan porque están en aislamiento por coronavirus, porque tienen dificultades para moverse o porque, al ser grupos de riesgo, deben extremar todavía más las precauciones para no contagiarse.
Su planteamiento básico es: "de paso que voy, no me cuesta". Y de eso se trata, de que aunque no se trate de necesidades básicas, en tiempos de cuarentena, toda ayuda es bien recibida. Se irán organizando a medida que vayan llegándole peticiones de ayuda.
Desde la taponeta se decidieron a ofrecer este nuevo servicio "visto cómo está la situación, que lógicamente no se puede andar por la calle si no vas a trabajar, a farmacias o al super". Enrique Magdalena llama la atención sobre el hecho de que "ya se está haciendo entre vecinos" y con su ofrecimiento solo amplían el campo de actuación de esta solidaridad espontánea.
Lo consideran "una responsabilidad como ciudadano", sobre todo, sintiéndose unos "privilegiados" por el hecho de "estar sano y estar bien y poder salir a la calle a trabajar". "Si puedo echar una mano, pues, mira, estupendo. A mí me gustaría que lo hicieran conmigo", concluye.