El Concello de Pontevedra está trabajando en la elaboración de un plano para ciclistas que indica las distancias entre un punto y otro de la comarca y el tiempo que se tarda en recorrerlas. La idea sigue el ejemplo del premiado Metrominuto.
En una primera fase se han elegido un total de once rutas para acceder a la ciudad en bicicleta.
Tomando como origen la plaza de la Peregrina se hace una estimación de tiempo de las rutas que discurren a lugares como Sanxenxo, al campo de golf (Meis), San Antoniño (Barro), O Pontillón, el Centro de arte rupestre (Campo Lameiro), el centro urbano de Ponte Caldelas, Arcade (Soutomaior), Figueirido (Vilaboa) o el puerto de Bueu.
Según fuentes municipales, el primer paso ha sido elegir el recorrido más adecuado de entre todas las alternativas posibles, para esto se han aplicado criterios de funcionalidad, seguridad, confortabilidad y también se ha pensado en el atractivo de la ruta elegida.
En estos momentos se está trabajando en la medición de los tiempos, para lo que se están empleando dos modelos diferentes de bici.
El espíritu de esta iniciativa intenta potenciar este tipo de movilidad para que se convierta en el segundo medio de transporte después de los pies, aclarando que no se trata de una mera fórmula deportiva, sino de la articulación de una verdadera alternativa al coche.
El plano del Metrominuto se ha convertido en una fórmula de éxito que triunfa dentro y fuera de nuestras fronteras. Ciudades como París, Florencia o Londres han copiado la idea del concello pontevedrés. Y en España multitud de municipios han hecho suya esta propuesta.