Los ánimos estaban tensos y la inauguración de la pista de skatepark provisional de Mollabao se convirtió en un patio de insultos y enfrentamientos entre vecinos del barrio y alrededor de 50 skaters que pretendían utilizar la primera pista deportiva instalada en condiciones seguras para la práctica del monopatín en Pontevedra.
Los vecinos se concentraron con pancartas dirigidas al concejal de Obras, Demetrio Gómez, que asistía acompañado por el presidente de la asociación Skate Pontevedra, Iago Lastra y otros jóvenes de este colectivo. Los residentes en la zona manifestaban sus protestas preguntándole al concejal dónde iban a jugar ahora sus hijos, mientras un grupo de niños jugaba al fútbol en la vía lindante al nuevo skatepark.
Los gritos, los pitos, los golpes en el suelo con los monopatines y las protestas centraron este polémica apertura del parque deportivo. El presidente de la asociación de vecinos Mollabao Sí, Juan Saenz-Diez Malvar, lamentaba estos hechos y señalaba que había sido una protesta espontánea por parte de particulares molestos con el hecho de que no se hubiera anunciado previamente este cambio de uso de la pista, pasando de ser un campo de fútbol-sala a una zona para la práctica del skate.
El presidente de la asociación Skate Pontevedra, Iago Lastra y otros jóvenes señalaban que la instalación era una demanda solicitada desde hace más de una década por los aficionados al monopatín del municipio y destacaba que este deporte será olímpico en 2020 y cuenta con numerosos seguidores en la provincia.
El Concello ha invertido alrededor de 9.000 euros en este proyecto, con un diseño elaborado en gran parte por los integrantes de la asociación pontevedresa. Demetrio Gómez señaló que se empleó la pista existente para aprovechar los recursos mientras no se construye la infraestructura definitiva en una parcela de entrada del campus universitario de A Xunqueira, situada en el entorno de la calle Celso Emilio Ferreiro.
CRÍTICAS
El malestar de los vecinos ante el cambio de uso de la pista deportiva sin haberlo comunicado previamente ha sido recogido por el Partido Popular que entiende que esta situación denota una flagrante falta de coordinación y sensibilidad por todos los actores implicados, según apunta Jacobo Moreira. El concejal César Abal se encontraba en la pista durante el momento de mayor tensión. Los vecinos señalan que la zona puede llegar a convertirse en un foco donde los jóvenes se agrupen para realizar botellones y consumir drogas.
Los populares señalan que resultan "insultante" que la solución provisional sea instalar la pista en el mismo sitio en el que el gobierno local había decidido no instalarla en 2011, "después de que el BNG se viera obligado a indemnizar a una empresa especializada que había ganado un proyecto valorado en 197.200 euros para la construcción del skatepark".
El PP critica la pésima gestión de Demetrio Gómez al que culpan de eliminar el único mercado que tiene Estribela, acabar con los consejos parroquiales y carecer de proyectos para las tres falsas cubiertas del tren. En este sentido, Moreira considera inadmisible que no se acordara de consultar a los vecinos de Mollabao sobre este proyecto.