La conmemoración del Día da Galiza Mártir, este jueves 17 de agosto, volvió a sacar a la luz una vieja reivindicación de colectivos de memoria histórica y del BNG de Cerdedo-Cotobade, la retirada de simbología fascista que aún se conserva en 35 inmuebles y una calle de Cerdedo.
El encargado de hacer memoria en esta ocasión fue Calros Solla, filólogo, profesor, etnógrafo y escritor que este año fue reconocido con el Premio Galiza Mártir en el acto organizado en el monumento a Alexandre Bóveda en la Caeira (Poio).
Solla, miembro fundador del colectivo cultural y ecologista Capitán Gosende, aprovechó su discurso de agradecimiento para hacer una solicitud, a título personal, "por la legítima potestad que me confiere esta distinción", al presidente de la Deputación de Pontevedra, Luis López, representado en el acto por el vicepresidente, Rafa Domínguez.
La petición es que "interceda sabiamente" para que el diputado provincial y alcalde de Cerdedo-Cotobade, Jorge Cubela, haga cumplir las leyes de Memoria Histórica y Memoria Democrática en este municipio, en el que hay 35 inmuebles que "a día de hoy aún exhiben la ilícita y abominable simbología fascista en Cerdedo".
Además, recuerda que en la propia capital cerdedesa, una calle recuerda el nombre de quién fue jefe local de Falange y controvertido alcalde franquista y la iglesia parroquial luce mármoles nostálgicos, "perpetuando la imagen de un Dios franquista y inmisericorde".
En su petición, Solla demanda al presidente de la Deputación que, si es necesario, haga una aportación económica al gobierno de Cerdedo-Cotobade para que "definitivamente y como es de ley" se erradique "esta anomalía".
"87 años después, seguimos en deuda con las víctimas del franquismo y con sus familias", recordó Solla, que añadió que "verdad, justicia y reparación son las poderosas razones que vertebran este 17 de agosto y que aquí hoy nos convocan".
El homenajeado también aprovechó su discurso para hacer una petición al conselleiro de Cultura, Román Rodríguez, presente en el acto. A título personal, le pidió que "aconseje bien" al presidente de la Xunta de Galicia, Alfonso Rueda, para, en la medida de las posibilidades de todos, "me los sea quien de mantener a Galicia lejana de las garras del fascismo reorganizado, al abrigo de los que enaltecen el golpe de Estado del 36 y la dictadura".