Cierre de filas en un Pontevedra que llama a "hacer piña" tras la debacle ante el Atlético B

Pontevedra
07 de octubre 2019

Jornada de reflexión en la casa granate visibilizada en el entrenamiento del primer equipo celebrado en Cerponzóns. Luismi se reunió por espacio de 20 minutos con la plantilla, después charló con el director deportivo, Roberto Feáns, y concluyó la sesión con otro encuentro con el capitán, Edu Sousa

Roberto Feáns, Edu Sousa y Luismi en Cerponzóns el día después de la derrota ante el Atlético B
Roberto Feáns, Edu Sousa y Luismi en Cerponzóns el día después de la derrota ante el Atlético B / PontevedraViva

Jornada de reflexión en el Pontevedra Club de Fútbol tras la debacle sufrida este domingo en Pasarón contra el Atlético de Madrid B.

Como cada lunes, Cerponzóns era el escenario del regreso al trabajo de la primera plantilla, y desde el primer momento se intuía que no era un día cualquiera. A las entendibles caras serias tras una derrota como la encajada, se unieron una serie de reuniones con la intención de cerrar filas y "hacer piña", tal y como reconoció el consejero responsable de la planificación deportiva, Roberto Feáns, presente en la sesión.

Pese a que el varapalo fue importante y ha hecho tambalearse el proyecto deportivo de esta temporada, ese es el mensaje que intentan trasladar desde el club, de unidad, mirando ya hacia el futuro y pensando en arreglar la papeleta venciendo el próximo sábado en un campo complicado como es el de la Ciudad Deportiva de Valdebebas, donde espera el Real Madrid Castilla.

Con algo de retraso sobre el horario previsto el cuerpo técnico saltó al terreno de juego de Cerponzóns, donde ya esperaban los futbolistas, para pedirles que entraran de nuevo en el interior de las instalaciones. Allí se produjo la primera charla, entre entrenadores y plantilla, por espacio de alrededor de 20 minutos.

Tras la misma se dio inicio a la sesión, de intensidad baja al tratarse de una jornada de recuperación para los titulares del domingo. Mientras los jugadores iniciaban el calentamiento se vivió otra de las imágenes del día, al sentarse a hablar el técnico, Luismi, con Roberto Feáns en uno de los banquillos del campo.

El consejero de la entidad quiso arropar así al entrenador, para abandonar poco después el terreno de juego y terminar marchándose.

El entrenamiento continuó desde entonces con relativa normalidad, una sesión en la que se ausentó el lesionado Campillo y en la que Edu Sousa trabajó a menor ritmo por precaución tras los problemas musculares que le empujaron a pedir el cambio ante el filial colchonero. Precisamente el capitán protagonizó la última reunión de la jornada al verse las caras con Luismi ya concluido el entrenamiento y por espacio de otros 20 minutos.

No era un lunes cualquiera, aunque con estos actos el equipo quiere recuperar cuanto antes la normalidad para demostrar que la goleada sufrida fue sólo un accidente.