El Pontevedra Club de Fútbol ha vuelto este miércoles a los entrenamientos tras una jornada de descanso pensando ya en el partido de primera ronda de Copa del Rey del próximo domingo (12.00 horas) en Manresa.
Lo ha hecho además con prácticamente toda la plantilla granate a disposición del técnico.
De esta forma, al no contar con sancionados para esta competición (Luis Martínez sí debe afrontar un encuentro de suspensión en liga), y con una semana después por delante hasta el próximo compromiso en la Primera RFEF, Antonio Fernández podrá echar mano de toda su artillería pesada, o casi toda, para intentar pasar la eliminatoria.
El único futbolista que se ha ejercitado a menor ritmo que sus compañeros ha sido el capitán Álex González, que ya se perdió el duelo frente al Castilla y que fija su objetivo en estar al 100% para la liga.
Además el guardameta Álvaro Cortés dio el susto en el entrenamiento al abandonar la sesión antes de tiempo tras un choque con un compañero que le provocaron molestias en la pierna derecha.