Desde el pasado 18 de diciembre, con un 0-2 en Algeciras, el Pontevedra Club de Fútbol no ha sumado ni un solo punto fuera de casa, y así pensar en la salvación se hace imposible. Ni siquiera en el campo de un Talavera colista y casi desahuciado los granates han conseguido este domingo sacar algo positivo, después de remontar dos goles en contra y desinflarse en los instantes finales (4-2) para ver como sus opciones de permanencia siguen descendiendo. Aún es matemáticamente posible, pero cada vez más improbable.
Los de la Boa Vila sabían que era un encuentro vital para sus aspiraciones, más tras saltar al campo sabiendo que el Sanse, rival que marcaba la zona de salvación, había cedido un empate. Sin embargo el equipo entrenado por Juan Señor pareció saltar al terreno de juego sin ambición. El Talavera fue el que se hizo con el dominio desde los instantes iniciales, con un Pontevedra al que no le duraba el balón y apenas se aproximaba al área contraria.
A los 6 minutos el conjunto local dio el primer aviso, en un saque de esquina sacabo por Riera que Buenacasa remataba de cabeza sin oposición salvando Cacharrón. Reaccionaron los granates con una acció individual de Álex González, pero su centro chut tras deshacerse de su marcador lo sacaba el guardameta. Era el minuto 7 y sería la única aproximación con peligro visitante de toda la primera mitad.
El guión no cambió, y en el minuto 12 pudo llegar el primer del Talavera. Riera filtra un balón profundo por el costado diestro de ataque de los suyos para la llegada de Álvaro Juan, pero el centro de este no lo aprovecha Escudero con todo a favor y al borde del área pequeña disparando desviado. Un aviso más que serio de que no era el camino para los granates.
Tanto empezó a ir el cántaro a la fuente que terminó por romperse pasado el ecuador del acto inicial con el 1-0. A los 26 minutos el equipo manchego recuperaba en cuarto de campo propio e iniciaba una rápida transición por la izquierda. Souley aguantaba la disputa con Bastos y servía de nuevo a la espalda de la línea defensiva para el desmarque de Escudero, que batía con la zurda por bajo a Cacharrón.
El golpe no hizo reaccionar al Pontevedra, y aunque el ritmo descendió ligeramente con menos llegadas locales, en un contragolpe al filo del descanso llegaba el segundo. En una mala transición defensiva Álvaro Juan recibía al espacio totalmente sólo por la derecha, encaraba al Cacharrón y cedía en el último momento para que de nuevo Escudero marcase a placer. Así se llegaba al descanso. El panorama era negro, pero todavía restaban 45 minutos para enmendar las cosas.
Señor movió ficha desde el banquillo, dando entrada a Yelko Pino y a Charles en lugar de Víctor Casais y de Rufo, que había sido la única novedad en el once inicial. Los granates adelantaban líneas para intentar apurar sus opciones, aunque lo primero que llegaba era una soble ocasión local, ambas en la cabeza de Buenacasa. La primera se encontró a Cacharrón y la segunda, a remate de una falta lateral, al larguero.
Perdonó la sentencia el Talavera y a continuación llegaría el 2-1 que, al menos, dabas esperanzas. Yelko cazaba un balón entre líneas, con espacio y tiempo para pensar poniendo un balón filtrado al punto de penalti para que Brais controlase al segundo toque cruzase marcando con la izquierda.
Por delante, todavía restaban 35 minutos, y el Pontevedra se estiró todavía más, lo que dejaba también opción a las contras manchegas. En una de ellas Cacharrón salvaba un mano a mano con Álvaro Juan para mantener en el partido a su equipo.
Ahora sí los de la Boa Vila buscaban con determinación la meta contraria. Brais estuvo de hecho cerca del empate con un disparo desde la frontal que se estrelló en el lateral de la red, y lo consiguió después a 10 minutos del final en un centro de Borja desde la derecha que se fue envenenando hasta que el 8 granate metió la bota para batir a Biel.
Los aficionados pontevedreses desplazados a Talavera de la Reina soñaban con la remontada y una victoria que aumentase las opciones de salvación en la Primera RFEF, pero cuando estaba más cerca el globo se pinchó. Escudero volvía a marcar en el minuto 85 rematando a bocajarro un centro desde la derecha mal defendido por la zaga, y repetía ya en el descuento con su cuarto tanto de la mañana para finiquitar el duelo. Antes Bastos había pedido un penalti por una patada de Souley en el área, con 3-2. Pareció claro, pero el colegiado no concedió lo que podía suponer el empate, claro que un punto tampoco era suficiente.
Tras este resultado y a falta de sólo 9 puntos por disputarse, el Pontevedra se hunde en la tabla a 6 ya de la permanencia.
CF TALAVERA (4): Biel Ribas, Álvaro Juan (Delorenzi, min.77), Morante, Neyder (Loukou, min.84), Dani Ramos, Lass, Reguera (Renan Zanelli, min.77), Sito Riera (Bueno, min.77), Escudero, Souley, Buenacasa (Edu Gallardo, min.66).
PONTEVEDRA CF (2): Cacaharrón, Ángel Bastos, Soto, Churre, Samu Araújo (Guèye, min.59), Miguel Román (Gonzalo Bueno, min.91), Borja Domínguez, Álex González, Brais Abalenda, Víctor Casais (Yelko Pino, min.46), Rufo (Charles, min.46).
Árbitros: Imanol Irurtzun Artola, auxiliado en las bandas por Domínguez Rubio y Martínez Guerrero (Navarra). Amonestó a Riera, Biel y Lass en el Talavera y a Brais Abalenda, Samu Araújo y Miguel Román en el Pontevedra.
Goles: 1-0 Escudero (min.26); 2-0 Escudero (min.43); 2-1 Brais Abelenda (min.55); 2-2 Brais Abelenda (min.80); 3-2 Escudero (min.85); 4-2 Escudero (min.91).
Incidencias: Partido de la jornada 35 de liga en Primera RFEF disputado en el Estadio Municipal El Prado de Talavera ante 2.068 espectadores.