A Fracha dice no al "capricho político" de la autovía A-57

Pontevedra
09 de noviembre 2014

Alrededor de 250 personas a pie y en bicicleta respondieron este domingo a la llamada realizada por el andén 'Salvemos a Fracha' y el colectivo Masa Crítica para 'tomar A Fracha' contra el proyecto de la autovía A-57

Marcha de protesta de Salvemos A Fracha
Marcha de protesta de Salvemos A Fracha / Diego Torrado

"Esta serra pola que acabamos de camiñar e pedalear hoxe deixaría de existir tal e como a coñecemos. Non só haberá unha mole de cemento polo medio, senón que desaparecerán os castiñeiros que acabamos de ver, as carballeiras, moitas das plantas e especies de fauna únicas que algúns puidemos gozar esta mañá". El mensaje de alerta la lanzó este domingo la plataforma Salvemos a Fracha a las alrededor de 250 personas que secundaron la caminata y la ruta BTT organizada por el colectivo y por Masa Crítica para mostrar su oposición al proyecto de la autovía A-57.

En nombre de los afectados habló Bibiana Piñeiro, una vecina de Marcón que leyó un manifiesto reivindicativo en el que arremetió contra la minstra de Fomento, Ana Pastor, a la que acusó de que "segue empeñada en facernos un agasalo envelenado" porque "quere deixar pegada en Pontevedra", la ciudad en la que reside desde hace tiempo.

El colectivo de afectados mantiene que para dejar huella en la vecindad no es necesario invertir 100 millones de euros en el primer tramo de la A-57, en tan sólo 6,4 kilómetros. El proyecto supone, según los cálculos de 'Salvemos A Fracha', una inversión global de más de 1.000 millones de euros en 64 kilómetros entre Ponteareas y Aprisco.

A la vista de estos datos y del impacto de la autovía en el monte de A Fracha y en el rural pontevedrés, desde la plataforma califican la autovía como "o colmo do despropósito", "un despilfarro en época de recortes" y "un capricho político ao que os hoxe aquí presentes dicimos non".

La 'andaina' y la marcha BTT recorrieron este domingo durante tres horas los montes afectados por el trazado del primer tramo de la A-57 para llamar a la atención sobre el impacto que tendrá esta infraestructura en el entorno y en los usos sociales que le dan los ciudadanos. Entre los participantes había integrantes de distintos colectivos pontevedreses como Vaipolorío, la asociación Monte Pituco, Masa Crítica, Greenpeace o UPyD y personas llegadas desde distintos puntos de Pontevedra, Vigo, A Coruña o Extremadura.

Los participantes que iban a pie y los que hicieron la ruta en bicicleta realizaron distintos recorridos, pero ambos comenzaron la terminaron en el lugar de Pintos, en la parroquia de Marcón, en uno de los puntos más afectados por lo trazado proyectado para a A-57. El punto de salida y reunión, según explicaron, quedará partido en dos por un talud de 60 metros de alto y 100 de ancho. Allí están ubicados en la actualidad los depósitos que nutren de agua varias decenas de casas y que van a quedar arrasados por la autovía.

Las dos rutas hicieron un recorrido circular y se prolongaron durante tres horas, confluindo en el alto de A Fracha, un mirador natural sobre las rías de Pontevedra y Vigo. En ese punto los participantes dejaron depositada una bandera verde con la que se busca concienciar a los numerosos pontevedres que lo frecuentan de que "en caso de que o proxecto siga adiante, o asfalto e o formigón partirán en dous a Serra da Fracha e ameazarán especies de fauna e flora únicas e en perigo de estinción". 

La autovía A-57 la promueve el Ministerio de Fomento, pero 'Salvemos a Fracha' denuncia qué cuenta con la complicidad del Concello de Pontevedra, no así el de Vilaboa, y de los tres grupos políticos mayoritarios en la capital, BNG, PSdeG y PP.

Archivado en